Revisar tu estado de cuenta de tarjeta de crédito, mes a mes, en formato físico o digital, es un
hábito importante que no debemos de olvidar o descuidar porque puede salir caro.
Los estados de cuenta tienen gran variedad de diseños lo que a veces no facilita su rápida lectura
pero ni modo, hay que aprender a leer estos documentos ya que cuentan, entre otras cosas, tus
gastos, pagos e intereses. Para ayudarte a conocerlos puedes comenzar por identificar los siguientes
conceptos que son fundamentales dominar:
– Fecha límite de pago: Es la fecha en la que a más tardar deberás de realizar el pago mínimo de tu
adeudo.
– Pago mínimo: Importante para cuando hagas tu presupuesto; este el monto mínimo a pagar para
que tu cuenta esté al corriente, evitando que se genere una clave de observación de atraso de pago
en tu historial contenido dentro de tu Reporte de Crédito de Buró de Crédito. De ser posible paga
siempre más del mínimo; así liquidarás tu adeudo con mayor velocidad pagando menos intereses
por el dinero financiado.
– Pago para no generar intereses: Es el importe que necesitas pagar para que no te cobren intereses
sobre tu adeudo. Busca siempre estar en condiciones de pagar este monto o incluso el total del
adeudo, así te estarás financiando entre las fechas de corte prácticamente gratis (porque la tarjeta de
crédito pudiera tener una anualidad que pagar u otra cosa).
– Fecha de corte: Es el último día del mes hasta donde se registraron operaciones en tu cuenta.
Supongamos que tu fecha de corte es el día 20 de cada mes, y realizaste una compra el día 21; ese
cargo se incluirá en tu estado de cuenta del próximo mes, lo que significa que tienes 40 días para
saldar ese adeudo sin tener que pagar intereses. Ten esta fecha en cuenta para programar tus
compras según tu presupuesto.
– Límite de crédito: Es la cantidad máxima por la que puedes realizar consumos con tu tarjeta.
Idealmente, no uses más del 50%. Recuerda que la tarjeta de crédito no forma parte de tu sueldo
sino es simplemente un método de pago más seguro y eficiente que el efectivo; además puede dar
un valor agregado en forma de puntos, millas aéreas o incluso “cash back”. Si tienes mucha deuda
acumulada en la tarjeta entonces estás usando el crédito para vivir de él y eso no es financieramente
saludable.
– Saldo: Importante también para tu presupuesto, este es el monto total que adeudas.
– Promociones: Aquí aparecen las compras que realizaste a meses sin intereses. Para quedar bien
con el otorgante de crédito y para mantener un buen historial crediticio es importante pagar los
montos requeridos de tus compras a meses sin intereses más el mínimo de tus otras compras.
Para hacer una buena revisión de tu estado de cuenta será necesario que conserves tus comprobantes
de gastos, también conocidos como “vouchers” o pagarés, así podrás compararlos contra lo que
refleja tu estado de cuenta. En caso de que no reconozcas un cargo, llama de inmediato a tu
institución financiera e ingresa una reclamación por cargo no reconocido.
Ten presente que el marco legal establece que dispones de 90 días, a partir de la fecha de corte, para
presentar la reclamación a la entidad financiera que emitió tu estado de cuenta.
Al momento de realizar tu reclamación anota el folio y la fecha máxima para recibir una resolución.
Si no estás contento con el resultado de la reclamación, siempre puedes pedir una segunda revisión
ante la Unidad Especializada de Atención a Clientes (UNE) de esa misma institución o en
Condusef.