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Flavia Alvaro, una mujer de 63 años, ha dado a luz a su hijo Sebastian en Viareggio, Italia, convirtiéndose en una de las madres más mayores del país en el momento del parto. El bebé nació prematuramente a las 31 semanas y cuatro días, tras someterse a un tratamiento de fecundación in vitro (FIV) en Ucrania. Este país no establece un límite de edad de 50 años para la inseminación artificial, lo que permitió a Flavia viajar a Kiev el pasado otoño para su tratamiento, a pesar del conflicto en curso con Rusia.
Hace dos años, Flavia había quedado embarazada por primera vez mediante fecundación in vitro en Ucrania, pero lamentablemente perdió al bebé tras 14 semanas. Determinada a ser madre, invirtió alrededor de 15 mil euros en un nuevo tratamiento que resultó exitoso. El nacimiento de Sebastian, que ocurrió hace dos días, fue por cesárea debido a un aumento repentino en la presión arterial de Alvaro, lo que llevó a los médicos a realizar una intervención inmediata para asegurar la seguridad de ambos.
Sebastian, quien actualmente pesa casi dos kilos, permanecerá en el hospital hasta que gane más peso. Italia ha visto varios casos notables de maternidad tardía. En 2010, una mujer italiana de 56 años dio a luz a un bebé concebido de manera natural. En 1994, otra mujer de 62 años tuvo un hijo mediante fecundación in vitro, un evento que atrajo gran atención mediática. Más recientemente, en 2019, una mujer de 73 años en India dio a luz a gemelos tras un tratamiento de fecundación in vitro.
El caso de Flavia Alvaro destaca las posibilidades que la ciencia moderna ofrece a las mujeres mayores que desean ser madres. Su historia es un testimonio de perseverancia y del poder de la tecnología reproductiva. Estos casos podrían cambiar las percepciones sobre la maternidad tardía y abrir nuevas oportunidades para mujeres en todo el mundo.
¿Qué es la Fecundación In Vitro?
La fecundación in vitro (FIV) es una técnica de reproducción asistida que permite a parejas con problemas de fertilidad concebir un hijo. Este proceso implica la extracción de óvulos de los ovarios de la mujer, que luego son fertilizados con esperma en un laboratorio. Una vez que los óvulos se convierten en embriones, se seleccionan los más viables y se transfieren al útero de la mujer para su implantación y desarrollo. La FIV es utilizada en casos de infertilidad por diversas causas, como la obstrucción de las trompas de Falopio, endometriosis y problemas de esperma, entre otros.