Chihuahua, Chih.- Parece que el presidente ruso Vladimir Putin se encuentra en una humillante encrucijada; lo que lo ha acorralado contra la pared. Ya que su guerra en contra su vecino Ucrania se está estancado y es que a cinco semanas de iniciado el conflicto, los rusos no han podido tomar la capital e informes de inteligencia estadounidenses afirman que seis generales del kremlin han muerto, que las tropas se encuentran desmotivadas, que las líneas de suministro sufren de constantes ataques y que la falta de combustibles sobre todo en el norte del país ha ralentizado cualquier intención de seguir avanzando.
Rusia no solo no avanza en sus objetivos, si no que comienza a perder terreno y es que el ejército ucraniano logro rodear a las tropas rusas en un pequeño pueblo llamado illich al norte de Kiev y ahora se están registrando fuertes combates en la ciudad de Jerson que previamente había sido tomada por el ejército ruso.
Las sanciones de occidente han cortado y limitado la capacidad de Putin para hacer la guerra y han provocado una crisis económica en la Federación Rusa. Sin contar que uno de los hombres más cercanos a Putin; Anatoli Chubais y enviado internacional para el desarrollo sostenible de Rusia renuncio a su cargo la semana pasada.
También en un intento por fortalecer al Rublo el kremlin ha ordenado que el gas que se vende a Europa solo pueda ser pagado en esta moneda, lo que ha puesto en aprietos a occidente pero también pone en riesgo los compromisos de deuda de la federación al no poder acceder a divisas internacionales como el Dólar o el Euro.
La preocupación de muchos analistas es que el Oso herido podría hacer uso de su armamento nuclear táctico, más aun si tomamos en cuenta que el presidente Joe Biden menciono en su discurso en Polonia que Putin debería ser removido del poder. En resumidas cuentas los tiempos que estamos viviendo son difíciles y esperemos que los estrategas diplomáticos actúen con prudencia porque cualquier paso en falso podría llevar a un autócrata a hacer uso de lo impensable con tal de levantar la cara ante los suyos.