Otros fueron los tiempos en los que las encuestas del periódico Reforma eran confiables, pues invariablemente se acercaban con mucha precisión a los resultados electorales.
La que publicó ayer, empero, deja mucho que desear. Su muestra es de mil encuestados en vivienda. Casi 500 no contestaron. Prácticamente le dieron con la puerta en las narices a los entrevistadores.
De los 500 que sí respondieron, 360 se manifestaron indecisos. Y 120 de los 140 restantes, dijeron que aún podría cambiar de opinión.
Con todo y ello a Sheinbaum le otorgan un 58 por ciento de intención del voto, mientras que a Xóchitl la dejan con un mísero 34 por ciento del total. Al testimonial Álvarez sólo un 8, mucho menos de lo que le dejó Samuel García.
¡Y AMLO obtuvo un 73% de aprobación!, lo que ninguna otra encuestadora le da. Roy Campos, por ejemplo, ha señalado que el presidente ya lleva dos semanas cayendo en sus cifras de popularidad que rondan en el más creíble 50%.
Algo pasó al seno de Reforma.
O le llegaron al precio a editores y encuestadores. O los amenazaron con cuestiones fiscales, como a muchos otros. O…
Vaya usted a saber.
Lo único cierto es que se extraña la mano experta de Lorena Becerra quien, hasta hace poco, conducía las encuestas de ese diario neoleonés.
* * *
En Argentina, dar pala es mentir, decir que vas a hacer algo y después no hacerlo.
En Chile, darse la pala significa salir y desquitarse, pasarlo bien, darlo todo en un carrete, y hasta “hacerse mierda”.
Y en México dar la pala es aparentar.
López Obrador ni siquiera da la pala. Ni siquiera aparenta su desdén hacia las madres que buscan a sus hijos desaparecidos.
“Que la deje ahí”, dijo el lunes cuando le preguntaron si recibiría a Ceci Flores, la incansable madre sonorense que desde hace más de una década busca a sus tres hijos, y quien le quería entregar “la pala de mando” con la que ha removido toneladas de tierra y escombros en su pesquisa.
No la recibió. Tampoco la pala.
Ayer martes ella llegó a Palacio Nacional vestida como beisbolista para ver si así la recibían, toda vez que AMLO recibe a cada rato de ese su deporte favorito. Tampoco.
En redes hicieron un meme aconsejando a doña Ceci que se disfrace de sobre amarillo,
Eso es lo que les gusta recibir a López y secuaces.
* * *
Suenan las alarmas en el cuartel naranja.
La caja registradora, en cambio, muy probablemente dejará de sonar si el candidato presidencial del también llamado Movimiento Caguama continúa su mala racha de golpeteo a las dos candidatas de lo que ahí llaman “vieja política”.
Si es lo único que sabe hacer va a provocar que Dante Delgado pierda la franquicia… y lo más importante, los recursos económicos que han sido bautizados como prerrogativas.
Y sin dinero no baila el perro, aunque se ponga tenis fosfo-fosfo.
Ya sin recursos, incluso, Dante puede recibir un empujón de Samuel García quien muere de ganas de hacerse del control del partidito.
Dinero le sobra al gobernador de Nuevo León.
Si no, ¿para qué tanta transa?