Un cachalote murió en Australia Occidental pocos días después de ser filmado en aguas poco profundas entre decenas de bañistas encantados, informaron las autoridades.
Los bañistas curiosos se acercaron a acariciar a la ballena de 30 toneladas tras ser observada el fin de semana cerca de la costa al sur de la capital estatal de Perth.
Pero oficiales de vida silvestre pidieron a la multitud alejarse del mamífero de 15 metros de largo al advertir que estaba claramente enfermo y cerca de morir.
«Es realmente raro que un cachalote se acerque a estas aguas metropolitanas», indicó el martes el oficial Mark Cugley, tras confirmar la muerte de la ballena.
«No sabemos por qué, fue muy raro. Obviamente no estaba bien»
Se realizó una tradicional ceremonia aborigen de ahumado para despedir a la ballena, una especie con un profundo significado para los indígenas locales.