El primer debate electoral presidencial, a pesar del derroche de 10 millones de pesos por parte del INE, dejó mucho que desear. Los candidatos no lograron sorprender y las fallas en la producción fueron evidentes. Mientras Xóchitl Gálvez de Fuerza y Corazón X México intentaba intimidar a Claudia Sheinbaum con la presencia de personas afectadas por tragedias, la candidata de Morena se mantuvo serena, aunque algunos la percibieron como soberbia. Por otro lado, Jorge Álvarez Máynez optó por una estrategia irónica, destacando los vínculos de corrupción de sus oponentes, especialmente de Gálvez. Sin embargo, el debate se vio opacado por errores técnicos y una falta de contundencia por parte de los candidatos, dejando la expectativa para un posible cambio en el segundo encuentro.
En cuanto a las propuestas, Álvarez Máynez sugirió medidas contra la corrupción, Gálvez anunció reducciones en adjudicaciones directas y Sheinbaum defendió su gestión en la CDMX. Aunque se esperaba más confrontación, el debate se centró en señalamientos de corrupción y ataques personales. Ahora, queda por ver cómo se reflejarán estos eventos en las encuestas y en la opinión pública, mientras la sociedad mexicana decide quién salió victorioso.
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La reciente secuencia de ataques en Chihuahua, desde el atentado contra un custodio del Cereso Aquiles Serdán hasta el tiroteo contra dos militares en la colonia Dale, sugiere una preocupante conexión que no puede pasarse por alto. Con la Fiscalía General del Estado y la Secretaría de Seguridad Pública aún en proceso de esclarecer el crimen del comandante José Guadalupe Medrano, el surgimiento de otro caso similar resalta la urgente necesidad de acciones contundentes.
Los hechos, que resultaron en la pérdida de una vida militar y dejaron a otro gravemente herido, exigen un fortalecimiento de los operativos de seguridad. Aunque se ha realizado la detención de presuntos implicados, aún no se les ha imputado formalmente ni se ha señalado su vinculación con grupos delictivos como «La Empresa». La transparencia y la acción rápida son cruciales en este momento para garantizar la seguridad y la confianza de la ciudadanía en las instituciones encargadas de protegerla.
Antes del esperado debate presidencial, los coordinadores de la campaña de Xóchitl Gálvez, Luis Aguilar en Chihuahua y Marco Bonilla en la capital del estado, se pusieron en marcha para asegurar una atención centrada en la candidata. Aguilar movilizó esfuerzos en la frontera, especialmente entre los empresarios juarenses, para resaltar el compromiso de Gálvez con la ciudad y sus propuestas sobre migración. Mientras tanto, Bonilla aprovechó los canales de difusión en Instagram para recordar diariamente las propuestas de Xóchitl y un poco de su trayectoria política, generando cierta confusión sobre si era un respaldo a su propia campaña, aunque el esfuerzo no pasó desapercibido. Ambos coordinadores planean una serie de apariciones esta semana para reforzar la agenda de visitas de Gálvez a la capital y Ciudad Juárez a mediados de mes, brindando aún tiempo para una organización más robusta.
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