CHIHUAHUA.- Por el robo de agua mediante las múltiples tomas clandestinas en Chihuahua, las autoridades estiman que el daño pudiera ser millonario. Mientras tanto, continúan siendo permanentes los operativos para clausurar las extracciones ilegales.
De acuerdo a como informara el director ejecutivo de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS), Alan Falomir, la Fiscalía General del Estado (FGE) está en proceso de judicializar algunas carpetas de investigación en torno a la problemática.
Falomir refirió que en días pasados localizaron y clausuraron dos tomas clandestinas en el acueducto Aldama-Talaopa y otras tres de agua potable en la zona sur que utilizadas para abastecer de forma ilícita a propietarios de granjas del sector, para el riego de cultivos y en el llenado de albercas.
El usuario que sea sorprendido con una toma clandestina —hizo hincapié Falomir— podría ser acreedor a una importante multa económica e incluso objeto de alguna denuncia penal.