Cada día sube de tono la guerra que libran Ricardo Monreal y Claudia Sheinbaum, que nada bueno traera para Morena con miras a la elección presidencial del 2024 en la que los morenos quieren repetir el triunfo del 2018 para seguir en Palacio Nacional otros seis años.
Sheinbaum no le perdona a Monreal que, según ella, haya intervenido a favor de la oposición en las elecciones del 2021, cuando la coalición “Va por México” le arrebató media Ciudad de México a Morena y dejó en desventaja al gobierno de la favorita del tabasqueño.
Monreal por su lado, culpa a la jefa del gobierno de la CDMX de los ataques que en las últimas semanas le ha lanzado desde su programa Martes del Jaguar la gobernadora de Campeche Layda Sansores, con el claro visto bueno de doña Claudia.
Hace unos días la doctora Sheinbaum reconoció que ella está de acuerdo con las revelaciones que ha hecho Sansores sobre Monreal, quien le respondió fuerte; que frene a “su jauría”, que sólo lleva a la división del movimiento que encabeza Andrés Manuel López Obrador.
Monreal no se quedó ahí, llamó a la gobernadora de Campeche “presunta delincuente” por violar la suspensión decretada por un juez para que se abstenga de difundir información producto de la intervención ilegal de las comunicaciones.
El coordinador de los senadores de Morena dejó entrever ayer que en diciembre tomará la decisión de continuar o no en Morena, recordó a José Alfredo Jiménez y cantó que “diciembre me gustó pa’ que te vayas. Que sea muy cruel adios mi navidad…”
Sí Monreal se va en diciembre, la guerra cobrará una mayor intensidad porque el zacatecano no se deja y sabe mucho de guerra sucia que podría ser de consecuencias para las aspiraciones de Sheinbaum con todo el el apoyo del inquilino de Palacio Nacional, a no ser que que la doctora frene su jauría, lo que se ve difícil.
De los seis priistas que levantaron la mano para la candidatura presidencial en las elecciones del 2024, el oaxaqueño Alejandro Murat lleva mano en los afectos del líder nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas. Los compromisos y las complicidades de los Murat con Moreno inclinan la balanza en favor del oaxaqueño-mexiquense que sería el candidato que presentaría el PRI ante la alianza “Va por México” si es que esta se concreta. La tlaxcalteca Beatriz Paredes está en la opción “B” y a los otros cuatro, el campechano ni los ve ni los oye. Alito Murat presume su relación con el presidente Andrés Manuel López Obrador pero eso no representa nada para el PAN y el PRD…Claudia Sheinbaum podría estar metida en serio un problema legal por su protagonismo proselitista, en el caso de la muerte de la joven Ariadna Fernanda, por aquello de que dio a conocer el video en donde el presunto asesino, Rautel “N” la lleva cargando en el estacionamiento del edificio en donde tiene su departamento. Sheinbaum violó el debido proceso en su afán de mostrarse en favor de la joven sacrificada, lo que seguramente no lo manifestaría si no fuera aspirante a la nominación de Morena para el 2024. Además atacó al fiscal de Morelos sin pruebas. Le podría costar la candidatura, si la ley se aplica.