El pasado martes, el Congreso del Estado fue escenario de una exhibición de habilidad política por parte de los diputados Alfredo Chávez y Jorge Soto, quienes no pierden la oportunidad para demostrar su experiencia. Cada vez que subían al pleno, era una segura reprimenda para el líder de Morena, Cuauhtémoc Estrada, que hasta agachaba la cabeza. Le lanzaban duros señalamientos que lo dejaban sin respuestas, mientras las diputadas Lety Ortega y Magda Rentería intentaban, sin éxito, defenderlo. Al final, las refutaciones eran rápidas y certeras, como un balón rebotando en un campo de fútbol.
Una de las frases más memorables del día la dejó Jorge Soto, quien con claridad sentenció: «Militarización es militarización, no lo quieran cambiar», en un intento por cortar de raíz las justificaciones históricas que los morenistas intentaban usar, como recordar los tiempos de Calderón. Sin duda, la discusión en el Congreso se mantiene caliente y todo indica que el jueves se pondrá candente el changarro.
Cambios bajo el agua en Comunicación Social del municipio de Chihuahua, y no precisamente de manera transparente. Hace unos días, cuando se estaban cocinando los cambios en la administración, una empleada regresó de su permiso de maternidad solo para encontrarse con la sorpresa de que la habían mandado como enlace a otra dependencia, con un menor sueldo. Por supuesto, no aceptó. Lo curioso es cómo, tras su regreso, las piezas ya no estaban en su lugar. Aún no sabemos quién ocupará su antiguo puesto de manera oficial, eso si ya revisaron el CPU, pero todo está en una USB con toda la información, pero los rumores apuntan a un reacomodo estratégico que pocos entienden.
No es la primera vez que pasa. Hace tiempo también salió Carolina Díaz, otra persona dedicada, y en un lapso corto ya van cuatro bajas. ¿Será una sacudida necesaria o están quitando piedras que no dejan avanzar? Lo cierto es que el equipo parece moverse más por razones internas que por cuestiones laborales. Esperemos que estos cambios no sean berrinches de liderazgo, sino una verdadera estrategia para mejorar. Aunque, con lo que hemos visto, cualquiera lo dudaría.
Andrea Chávez expuso con contundencia la grave situación de violencia que enfrenta la ciudad de Chihuahua en su discurso en el Senado. Al mencionar a la capital entre las más violentas del país, la rival de Cruz Pérez Cuéllar hizo un llamado a la realidad que, aunque incómodo, no puede ser refutado. Su intervención no fue mala, de hecho, si somos objetivos, le salió bastante bien. Destacó también los problemas de inseguridad en otros municipios como Ojinaga, Manuel Benavides y Coyame del Sotol, resaltando que la capital del estado está sumida en una crisis de violencia que difícilmente puede negarse.
Lo más preocupante es que las estadísticas la respaldan. En comparación con tragedias como el AeroShow, donde murieron muchas personas, ahora vivimos lo equivalente a dos o tres “aeroshows” al mes en cuanto a violencia se refiere. La esperanza está en que las cosas mejoren, pero con las actuales estrategias de seguridad en la capital, que se asemejan a las implementadas por el gobierno federal, parece que solo se aferran a métodos que no están funcionando. Si seguimos así, el censo del INEGI nos pondrá en una posición decreciente en términos de población y calidad de vida.
El que anda bien volado y con delirio de influencer es Miguel Riggs, que dijo va a andar golpeteando a la administración municipal todos los días y publicando videos del de según él, evidencia la ineficiencia y exceso de gasto.
De lo primero que hablo, fue de que en los pasados tres años, se gastaron 15 mil millones juntos y todavía hay obras en sus últimas etapas, mientras que entre todas las grandes no llegan ni a los mil millones gastados, por lo que critica que se gaste tanto en la operatividad.
Al ponerlo de esa manera y magnificar cantidades, es obvio que hasta alarmante se ve y pareciera que todo se va en pago de más de cinco mil funcionarios municipales, mientras que obras del Presupuesto Participativo, apenas alcanzarán los 700 millones…en 3 años.
Parece que le gusto cuando anduvo de síndico y andar viendo números; no obstante, se sabe que los diferentes gastos no son solo de sueldos y obras, sino de mantenimiento de todo de todo; claro, que es más alarmante hablar de cifras elevadas.
A ver cómo le va al antes panista, luego naranja y ahora morenista, con estas encomiendas.
Por cierto, ayer se llevó a cabo al primera sesión de Cabildo en el Seccional de Guadalupe, unas de las cinco zonas rurales que se divide el Municipio; todo muy padre con los presidentes y agradeciendo mil y un cosas. Tan contentos todos comiendo hasta pastel y se anunció que en octubre hay otra sesión en el campo, que será ora El Charco.
Aquí la pregunta es y ¿Pal’ Sauz pa cuando? Si la administración municipal presume de resultados en seguridad y todo muy fregón, ¿Porqué va más de un año que no hacen eventos allá al Norte?
Como dicen, “si el miedo no anda e burro”; al menos los verdaderos valientes son los habitantes de El Sauz, que no tienen de otra más que seguir aguantando y esperar que los malandros se vayan o mínimo que los soldados hagan su jale, pero bueno…se vale soñar.