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En Rinconada Los Nogales Sur, la ineptitud de las autoridades locales ha permitido que un problema comunitario se pudra —literalmente— ante los ojos de todos. Más asentamientos irregulares han crecido sin control entre las calles Sierra, el arroyo Cacahuatal y la planta fundidora de Ávalos, donde se queman basura y desechos a cielo abierto, provocando un hedor que invade viviendas a kilómetros. Los vecinos han denunciado una y otra vez, pero ni la Dirección de Desarrollo Urbano y Ecología, encabezada por la arquitecta Adriana Díaz Negrete, ni la Dirección de Seguridad Pública han hecho algo más que ignorar. Mientras tanto, los asentamientos continúan expandiéndose, invadiendo cauces y robando servicios, sin que nadie los detenga.
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Lo más grave es que este desastre ambiental y social se ve alimentado por la omisión —o complicidad— de los mismos cuerpos policiacos, algunos de cuyos elementos, según se reporta, ya tienen terrenos en la zona y miran hacia otro lado cuando se habla de narcomenudeo o picaderos. La ausencia de Desarrollo Humano ante este escenario es escandalosa; no hay políticas de contención, reubicación ni atención directa a las familias que viven en condiciones insalubres y peligrosas. Este caso no solo exhibe un problema de ordenamiento territorial, sino una profunda crisis de gobernabilidad local, donde reina el abandono y huele —literalmente— a fracaso institucional.
En los últimos días, varios eventos escolares han tenido lugar en el Auditorio Municipal, ubicado en la calle Cuauhtémoc y Miguel Olea. Sin embargo, los asistentes han expresado su descontento con las condiciones en las que se encuentra el recinto.
El auditorio carece de sillones en buen estado, un sistema de sonido adecuado y una iluminación suficiente. Además, no cuenta con medidas de seguridad previas, aunque se hacen presentes algunos elementos de protección civil durante los eventos.
La situación se agrava con la presencia de vendedores ambulantes en el exterior, que bloquean las calles y dificultan el acceso al recinto. Asimismo, la falta de un área de estacionamiento destinada para los usuarios genera problemas de tráfico y seguridad.
Los asistentes y usuarios del auditorio exigen mejoras urgentes para garantizar la seguridad y comodidad de quienes acuden a los eventos. ¿Qué medidas tomarán las autoridades para abordar esta situación?
Tanto presume el Municipio de Chihuahua de buena percepción en seguridad, que hasta varias encuestadoras posicionan a la capital entre las primeras 5 mejores ciudades de México y en otras casi en la número uno.
Nada más lejos de la realidad y no solo por los 17 homicidios que van en estos primeros días de junio, que se perfila para ser el mes más violento, sino por que la gente nomás no confía en la policía.
Para muestra, solo basta el último caso en que asaltaron a un adulto mayor a las afueras de un banco para despojarlo de 190 mil pesos, que quizás era parte de su retiro, iba a comprar un auto, un regalo para sus nietos, hijos o pagar algo importante.
Por si no lo sabían, la Dirección de Seguridad Pública Municipal cuenta con un programa de acompañamiento bancaria, en que la persona que va a sacar o depositar dinero en un banco, solo tiene que llamar al 911 y pedir el servicio sin que los agentes le hagan preguntas.
Todo parece muy padre y podría evitarse asaltos o robos, pero la realidad es que en los 6 meses de este año, solamente 2 personas han solicitado este servicio, dicho por el mismo comisario, Julio Salas.
Esto, refleja no solamente la falta de esta campaña, sino la percepción de la ciudadanía hacia sus protectores, en otras palabras, confían en todos menos en los polis. Esto, por que se sabe el nivel elevado de corrupción y abuso de todos los elementos de las corporaciones de seguridad, que pedirles que los apoyen para ir por dinero, sería ponerse en el blanco de los criminales o de ellos mismos. El miedo a que los mismos oficiales puedan asaltar es grande que incluso en las redes sociales, no paran los comentarios cuando publican la campaña.
Esta percepción de la gente que no confía en la corporación no es gratis ni es una campaña de Morena, es una realidad, de que la Policía Municipal está podrida y se pone cada día peor, sin liderazgo y una bazofia de estrategia para todo.
Por cierto, ahora está el servicio para que puedan comprar o vender autos ahí en la Comandancia norte y que los van a apoyar para verificar si los vehículos están en regla. A ver como les va, no vaya a ser que algún agente se le antoje robarse un carrito y la gente no pueda hacer nada al respecto; aquí se verá si la gente confía o no en sus policías.
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