Destrucción del Antonov AN-225 PAUSA.MX

El fuselaje de este avión es un enorme agujero carbonizado y retorcido. Sus gigantescas alas están desplomadas en suelo, mientras de sus motores está fue quemado y destruido.

Aún se alcanza a ver el enorme tren de neumáticos sobre el que se asienta el avión, al igual que la nariz en cono hecha jirones, que luce orgullosamente las rayas azules y amarillas de la bandera de Ucrania y el «225» de su designación oficial.

Pero, está claro que el avión comercial más grande del mundo, el Antonov AN-225, nunca volverá a volar.

Periodistas pudieron observar el alcance total de los daños que sufrió la aeronave, llamada «Mriya»o «sueño» en ucraniano, después de que las tropas rusas se retiraran la semana pasada del aeródromo de Hostomel en las afueras de Kyiv. Justamente, uno de los primeros objetivos estratégicos en la invasión a Ucrania.

El avión yace arrugado y quebrado debajo del arco destrozado de un hangar de aviones, donde esperaba un mantenimiento cuando ocurrió la invasión.

A su alrededor se encuentran los deshechos de la guerra: el aeródromo está lleno de equipos rusos destruidos, incluidos camiones, tanques, vehículos blindados de transporte de personal y municiones gastadas.

La destrucción del AN-225 fue una pérdida simbólica en los primeros momentos de la guerra. El avión, que se construyó originalmente para apoyar el programa de transbordadores espaciales soviéticos de la década de 1980, había sido un símbolo de orgullo para Ucrania.

Por AL PE

Social Media Auto Publish Powered By : XYZScripts.com