PAUSA.MX

China ha tomado la decisión de reducir las tasas de referencia para préstamos, lo cual es la primera vez que se realiza en diez meses, en un esfuerzo por sostener la recuperación económica del país que parece estar perdiendo impulso. Los expertos del mercado están a la espera de más medidas de estímulo.

El florecimiento inicial de la recuperación post-pandémica de China, especialmente evidente en el primer trimestre del año, muestra ahora signos de ralentización. Ante este escenario, las autoridades chinas han flexibilizado su política monetaria. La tasa preferente de los préstamos a un año (LPR) ha bajado en 10 puntos básicos, ubicándose en un 3,55%. De manera similar, la LPR a cinco años ha sido reducida en el mismo margen, pasando de un 4,30% a un 4,20%.

Una encuesta de Reuters reveló que todos los participantes del mercado encuestados esperaban estos recortes de tasas. Recientemente, el Banco Popular de China (PBOC) redujo las tasas de interés a corto y medio plazo, lo que sugiere que está listo para emprender otra ronda de relajación monetaria para impulsar la recuperación.

La tasa de interés de la facilidad de préstamo a medio plazo (MLF) es la guía para el tipo de interés a largo plazo. Los mercados suelen considerarla un indicador de cualquier cambio en las tasas de préstamo.

Estas reducciones de tasas harán que el costo de los nuevos préstamos, así como los pagos de intereses de los préstamos existentes, sean menores. «Esto debería ofrecer un modesto apoyo a la actividad económica», opinó Julian Evans-Pritchard, economista jefe para China en Capital Economics.

En respuesta a la desaceleración económica, el gabinete chino discutió medidas para estimular el crecimiento económico y prometió implementar más políticas de apoyo.

Los analistas de BofA Global Research sugirieron que es probable que se pongan en marcha medidas adicionales, como una reducción acumulativa de 25 puntos básicos de la tasa de interés a largo plazo para finales de año y políticas de flexibilización de la propiedad para reducir los ratios de pago o las tasas hipotecarias. También podría existir algún tipo de apoyo al consumo.

Estos cambios, aunque modestos, pueden ayudar a evitar que el crecimiento se desacelere drásticamente, pero es poco probable que proporcionen un impulso significativo para revertir la tendencia a corto plazo. En línea con esta percepción, varias instituciones financieras han reducido sus previsiones de crecimiento económico de China para este año.

Los préstamos más nuevos y pendientes en China se basan en la tasa a un año, mientras que la tasa a cinco años influye en el precio de las hipotecas. La última vez que China redujo ambas tasas fue en agosto de 2022 en un intento de impulsar la economía.

Por AL PE

Social Media Auto Publish Powered By : XYZScripts.com