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Es interesante observar cómo los funcionarios locales, como Mariana de Lachica, Alejandro Olivas y Roberto Fuentes, han salido a dar la cara ante la crisis del fraccionamiento Monte Xenit, explicando las medidas de apoyo a las familias afectadas y los procesos legales contra la desarrolladora Dexe S.A. de C.V. Sin embargo, su esfuerzo por mostrar avances y compromiso contrasta con un silencio notorio: el de Adriana Díaz Negrete, titular de la Dirección de Desarrollo Urbano y Ecología. ¿Por qué la funcionaria responsable de supervisar los permisos y la normatividad urbana no aparece en el escenario público? Las especulaciones no se hacen esperar. Desde su etapa como regidora, su nombre ha estado ligado a este tipo de controversias, y hoy, cuando la responsabilidad de la verificación de uso de suelo y la planeación urbana recae directamente en su dirección, su ausencia en las declaraciones públicas levanta sospechas. ¿Se trata de proteger un compromiso político o de encubrir omisiones más graves?
La Dirección de Desarrollo Urbano y Ecología debería ser la punta de lanza en garantizar que todo proyecto en Chihuahua cumpla con las normativas federales, estatales y municipales, desde una simple ampliación de vivienda hasta desarrollos habitacionales de gran escala. Su labor, como ventanilla de trámites, es vigilar el estricto cumplimiento de las leyes urbanas y ecológicas, asegurando que no se repitan tragedias como la de Monte Xenit, donde un dictamen reveló vicios ocultos y falta de sustento técnico en la construcción. Sin embargo, la opacidad en torno a la titular de esta dependencia sugiere que el cargo podría no estar a la altura de las exigencias. Mientras las familias afectadas buscan respuestas y el municipio promete justicia, la ciudadanía se pregunta: ¿hasta dónde llega el compromiso de proteger a esta funcionaria?
A ver que explicación dan Julio César Salas y Marco Bonilla por la mega estrategia de seguridad que implementaron para evitar robos en algunas zonas de la ciudad.
Una unidad de la policía municipal estacionada afuera de un Oxxo, en la avenida Tecnológico, pensaría que está a la defensiva, pero… ¡La unidad está sin agentes!
Así es, estacionan la unidad con las torretas prendidas y sin agentes, por lo que el juego del gato y el ratón, es una técnica preventiva de primer nivel.
En los corridillos policiacos dicen, he dicen, que el mismo Salas les renta las patrullas a los negocios, para dibujar la liebre.
En política, la paciencia es una virtud… al menos eso dicen los que todavía no levantan la mano. José Luis Villalobos, diputado local del PRI, acaba de confirmar que no está pensando en ser candidato a la alcaldía de Chihuahua, pero que, si su partido y la ciudadanía se lo piden, pues lo pensará. No lo está buscando, pero si se lo encuentra en el camino, tampoco lo va a esquivar.
Lo curioso es que apenas estamos desempacando la actual administración y ya hay más suspirantes que electores en algunos distritos. Villalobos, eso sí, jura que su prioridad es dar resultados legislativos. Como quien dice: primero los dictámenes, luego los templetes. Aunque, deja claro que si de aquí a que “sea tiempo” el PRI no tiene carta fuerte, él estaría dispuesto a sacrificarse… por el bien del partido, claro está, y porque mantienen el discurso de ir solos en 2027. Y aunque esa decisión les pueda costar el registro.
