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Ya se la reviró Cruz Pérez Cuellar a Marco Bonilla, con eso de que los califican por fuera, pos ya salió a la luz el resultado que posiciona a Ciudad Juárez como mejor evaluada en transparentar el Presupuesto Participativo, algo que el alcalde de la frontera hizo denotar mucho en un tiktok, donde también hizo referencia a la capital del estado, como nada mejor evaluada y hasta dijo que fue reprobada por la Auditoría Superior del Estado.
Desde hace varias semanas que comenzó la carrera política rumbo a la Gubernatura en 2027, pero parece que no se andarán con medias tintas y aprovecharán cualquier error uno del otro para hacerlo mostrar al público.
Mientras Marco trae la campaña de #JaleMataGrilla, Cruz se lanza con todo y todo, así que se esperan más cosas antes de terminar este año.
A quienes no les llegará la Navidad será a uno o dos directores de dependencias municipales, que ya están en la mira por abuso de autoridad y parece que no habrá quien los salve, porque ya hasta hay denuncias por coso laboral.
No solamente es en contra de Adriana Díaz, de Desarrollo Urbano y Ecología, sino dicen que también para el ahora director de Desarrollo Humano y Educación, Mario García, que se dice viene arrastrando varias inconformidades de personal desde que estaba en el DIF, otra razón para moverlo de ahí.
Desde la administración anterior, se había especulado una inminente salida de la arquitecta, pero como bien sabemos, está ahí por órdenes de Palacio de Gobierno; en el caso de García, al ser muy operador, podría ser una baja en la administración, pero si se quiere tener una imagen de justicia y humanista, habrá que revisar estos dos perfiles, porque parece que no son los únicos.
Mientras en otros municipios se cuecen habas, en Santa Isabel las botas y sombreros se ajustan al ritmo de la grilla. El senador Mario Vázquez, siempre estratégico, y su compadre Fernando Ortega, alcalde de la localidad, parecen haber encontrado oro en los eventos gruperos. Este pasado domingo, ambos supervisaron con gran entusiasmo un baile que incluyó concierto y venta de cerveza, aunque, según los lugareños de General Trías, no todo quedó en los aplausos. Los rumores apuntan a violaciones de las leyes de alcoholes y protección civil, vendiendo bebidas a menores y llenando los recintos más allá de lo permitido. Eso sí, el flujo económico parece apuntalar tanto las aspiraciones del senador para la alcaldía de Chihuahua como la creciente fortuna del alcalde, quien ya tiene fama de “lagartón de rancho”.
La alianza de estos personajes no es nueva, y su experiencia en el negocio del entretenimiento viene de años atrás. Lo que resulta preocupante es que, mientras se llenan los bolsillos, las reglas parecen ser letra muerta. Mario Vázquez, con su ojo puesto en la silla municipal de Chihuahua, no se detiene ante los cuestionamientos, y Ortega, como buen anfitrión, sigue siendo el maestro de ceremonias de una caja chica que, al parecer, no deja de crecer.