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La puesta en operaciones del puerto de Matamoros reforzará el comercio exterior en Tamaulipas, cuyas metas estarán a largo plazo, sin influir directamente en el movimiento como los planes de inversión de Altamira, ambos con la intención de posicionarse como también contribuir a la economía de la entidad y con vocaciones diversas, indicó el Comce.
Mientras en el norte su máximo competidor será Brownsville, además de preparar sus servicios para las empresas petroleras frente a las costas de la entidad, la zona sur mantiene su potencial por las próximas tres décadas y seguir atendiendo los mercados de Monterrey, San Luis Potosí y el Bajío, dijo el presidente del organismo Felipe Pearl Zorrilla.
“La competencia que tendrá el puerto de Matamoros será con Brownsville, al cuál se le ha invertido mucho. Ayudará a hacer competitivo a México hacia el hemisferio norte, mientras Altamira tiene un desarrollo a servirle para los próximos 30 años. La clave será la sinergia de promoción, viajes de funcionarios para traer más carga de inversionistas”, declaró.
Para el Consejo Mexicano de Comercio Exterior, ambos puntos marítimos en el Golfo de México, con sus terminales privadas, harán diferencia en el sector en los siguientes años, aunque en cuanto a demanda, terrenos, capacidad y experiencia, Altamira tiene muchas ventajas por ofrecer.
“Es el único con miles de hectáreas al lado del mar, con terrenos planos, con los elementos atractivos como la comunicación, el gas, la energía y un puerto de clase mundial, lo hace un lugar privilegiado que pocos tienen en México, además de estar muy cerca de mercados como Monterrey San Luis Potos y hasta con vocación dirigida al Bajío”, agregó.
De esta manera, ante el anuncio hecho por la Secretaría de Desarrollo Energético del primer buque en arribar a una muelle en septiembre próximo, lo ve positivo y con ganancias para empresas, agentes aduanales y proveedores a largo plazo.
“Altamira y Matamoros van a contribuir a la economía de Tamaulipas como de México, aunque este último a largo plazo, con un crecimiento paulatino. Su ventaja es estar frente a la zona de los pozos petroleros, es un puerto natural para dicha industria, pero eso no impactará en Altamira”, puntualizó Pearl Zorrilla.