El as de los New York Yankees, Gerrit Cole, se someterá a la cirugía Tommy John para reparar un desgarro en el ligamento colateral cubital de su brazo derecho. La intervención quirúrgica lo dejará fuera de la temporada 2025 y pone en duda su disponibilidad para buena parte de 2026, considerando que la recuperación de este procedimiento oscila entre los 12 y los 18 meses.
La información fue dada a conocer por la organización neoyorquina este lunes. El doctor Neal ElAttrache realizará el proceso en Los Ángeles.
El golpe para los Yankees es demoledor. Cole, de 34 años, es la piedra angular del pitcheo neoyorquino y viene de ganar el premio Cy Young de la Liga Americana en 2023. Sin embargo, su codo derecho comenzó a generar preocupación en los entrenamientos primaverales, lo que lo llevó a múltiples evaluaciones médicas hasta que los peores temores se confirmaron: una cirugía reconstructiva que lo sacará de circulación en un momento clave para la franquicia.
El problema para los Yankees no es sólo la ausencia de Cole, sino el vacío que deja en una rotación ya comprometida. Luis Gil, proyectado como el tercer abridor, también estará fuera al menos los primeros tres meses por su propia rehabilitación. Sin sus dos opciones más explosivas, los Yankees arrancarán la campaña con un grupo de abridores que genera más preguntas que certezas: Max Fried, Carlos Rodón, Marcus Stroman, Clarke Schmidt y probablemente un reemplazo improvisado.
Cole se encuentra en el quinto año de su megacontrato de nueve temporadas y 324 millones de dólares, firmado antes de la campaña 2020.
El problema es que la organización construyó su proyecto alrededor de él. Desde su llegada, ha sido el símbolo de estabilidad en una rotación que ha lidiado con lesiones e inconsistencias. Sin él, los Yankees pierden a un lanzador que ha promediado más de 200 entradas por temporada y que, más allá de sus números, ha sido el líder indiscutible del cuerpo de lanzadores.