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Parece que a Miriam Soto, alcaldesa de Meoqui, el poder le ha subido a la cabeza, según quienes la conocen de cerca. Comentan que, aunque como persona sigue siendo la misma, en el ámbito político su ego y soberbia han crecido al punto de volverse insoportable. Ya no acepta críticas, sugerencias o cualquier tipo de retroalimentación, convencida de que siempre tiene la razón, lo que ha dificultado el trabajo de quienes intentan colaborar con ella.
Como suele pasar, el poder es un ladrillo del que muchos se marean rápidamente, y las caídas suelen ser duras. Algunos ya ven difícil que Soto llegue más allá de la política local, pues aunque ha sido mencionada como posible candidata para puestos más altos, la realidad es que su nombre aún no pesa lo suficiente en el panorama estatal. Solo queda esperar que recupere la humildad y sencillez que alguna vez la caracterizó, antes de que sea demasiado tarde.
Con una agrupación civil que se llama “Salvemos los Cerros de Chihuahua”, el Municipio hizo una consulta pública, la cual acabó y ganó que se declare área natural protegida el Cerro del Caballo, pero, la Secretaría del Ayuntamiento dice que no se sabe qué sigue, o sea por política la tienen detenida, porque los reglamentos deben ser muy claros después de una consulta y afectaría intereses si hay planes de desarrollos o construcciones en ese cerro.
Pos ni tampoco allá en la Dirección de Desarrollo Urbano y Ecología, se dan por enterados de estos y al parecer, seguirán aceptando proyectos a diestra y siniestra; total, ya fue rarificada Adriana Díaz como directora contra todo pronóstico y nomas por encomienda de Palacio de Gobierno; al menos, la historia de “mean girls” le hizo justicia a la menos popular.
Solamente el detalle que está dependencia se separará y parece que la que será Coordinación de Protección Ambiental, le va a hacer la vida difícil para acaparar cualquier proyecto nomas por unos billullos. Dicen por ahí, que la premiada para esta coordinación sería la ex regidora de origen raramuri, Chelita Rojas, quien no solamente por su paso en el Cabildo, sino también por ser su mero mole la ecología, que es de lo que está estudiada y más, por darle protagonismo a una etnia y quedar bien en todos sentidos. Hay que recordar que estos tres años son claves para el 2027 y hacer lo posible en convencer a la gente de ser la mejor opción.