Juárez tiene un valor especial para Acción Nacional, no solo por su peso electoral, sino también por su lugar en la historia del partido. Recordemos que fue una de las primeras ciudades en México en cambiar de manos políticas, gracias a Francisco Barrio en los ochentas. Después de un tiempo fuera del reflector, el PAN está de vuelta y se nota.
Ahora, con las elecciones en el horizonte, el PAN se ha puesto las pilas. Regidores, diputados locales y sus liderazgos han unido fuerzas y están listos para lo que viene. Han arrancado con todo, anunciando que no van a dejar pasar ni una, menos en Juárez.
Alfredo Chávez, el jefe de los diputados del PAN, no se quedó atrás. Fue directo a la frontera, a la casa del alcalde Cruz Pérez Cuellar, para apoyar a sus compañeros y dejar claro que van a seguir señalando cada sospecha de corrupción en su administración. Entró en la boca del lobo, pero no se achicó.
Los locales, Marisela Terrazas y Gabriel García Cantú, tampoco se quedaron callados. En confianza con los suyos, dejaron claro que no van a parar. Están decididos a investigar todas las irregularidades que encuentren y a sacarlas a la luz.
La situación en Juárez se está calentando y ahora todos están esperando ver qué tiene que decir el alcalde Cruz Pérez Cuellar. Después de que el PAN le ha lanzado estos dardos, no le queda otra que salir a dar la cara. Ha minimizado los comentarios hasta ahora, pero con esta nueva embestida del PAN, va a tener que responder de manera contundente o seguir de largo.
En un giro político significativo, la Universidad Autónoma de Chihuahua ha logrado una gestión crucial para poner fin al conflicto planteado por los trabajadores administrativos que llevaron a la toma del centro de la ciudad a principios de semana. Ante esta situación, se anunció una aportación de emergencia de 17 millones de pesos destinada a un aumento salarial del 20% para 742 empleados pertenecientes al STSUACH, reflejado en la última quincena de enero. Sin embargo, el rector Luis Alfonso Rivera Campos no se detiene aquí y está programado para viajar a la Ciudad de México el 1° de febrero, donde se reunirá con la licenciada Carmen Rodríguez, directora general de Educación Superior de la Secretaría de Educación Pública Federal, con el objetivo de obtener apoyo federal adicional de 16 millones de pesos. Este financiamiento está destinado a cubrir un aumento salarial para los 380 trabajadores restantes, que se encuentran en las categorías A y B del sindicato.
Esta reunión adquiere un carácter histórico, ya que representa la primera vez en la que el gobierno federal accede a dialogar con los representantes tanto del organismo sindical como de la Universidad. Este gesto podría marcar un precedente importante en las relaciones laborales y sindicales, abriendo la puerta a futuras colaboraciones y negociaciones entre las instituciones educativas y el gobierno central.
En el anuncio de los perfiles para las precandidaturas a diputaciones federales por el PRI, la falta de sorpresas fue evidente, ya que la mayoría de los nombres eran un secreto a voces. Sin embargo, lo que destacó fue la ausencia de candidatas mujeres en estas aspiraciones. Antonio Meléndez, figura indiscutible que garantiza votos, se perfila como la carta segura para el V Distrito, mientras que Noel Chávez, con arraigo en la zona sur, se posiciona para el IX Distrito, según el acuerdo de la coalición Juntos por el Bien de Chihuahua.
El reparto entre PRI, PAN y PRD para las diputaciones federales contempla que al tricolor le correspondan los Distritos II y III de Juárez, con Manuel Alarcón Villar y Jorge Armando Meléndez de la Torre como contendientes. Sorprendentemente, el líder estatal del PRI, Alejandro Domínguez, se reserva los distritos VIII y V, a pesar de las primeras indicaciones de que serían designados por el PAN. En un complejo esquema de alianzas para las elecciones federales, finalmente, PRI obtiene cuatro demarcaciones, PAN cinco y PRD una, el I Distrito en Juárez. En un intento de cuadrar números, se revela que Acción Nacional cede al tricolor el V Distrito, prefiriendo apostar por Tony Meléndez en lugar de competirle.
En un cruce de declaraciones políticas, Manlio Fabio Beltrones no escatimó críticas hacia Javier Corral, calificándolo como un «reverendo mentiroso» que ha llevado una vida marcada por la deslealtad y la ambición. El exgobernador de Sonora y exsecretario de Gobernación señaló que Corral, se unió a otro partido para vender sus mentiras, insinuando que su delirante estrategia de involucrar a figuras como «La Coneja» y Peña Nieto en sus indagatorias respondía a un intento por brincar a la candidatura presidencial. Beltrones describió a Corral como un político desviado y perverso, carente de proyecto, rumbo e ideología, enfatizando su disposición a utilizar a sus amigos para avanzar en la vida pública.
A pesar de las fuertes acusaciones, se advierte a Corral que debe tener cuidado con Beltrones, a quien no le llega ni a los talones según el exsecretario. Este último, a pesar de haber estado escondido durante el sexenio de Felipe Calderón y ser dueño de diversos negocios, se presenta como un hombre de Estado con una memoria aparentemente inquebrantable. La confrontación entre estos políticos revela las tensiones y divisiones en el ámbito político mexicano, marcadas por acusaciones personales y cuestionamientos sobre la autenticidad de las lealtades.