Luis Rivera Campos, Rector de la UACH, enfatizó que la universidad siempre prioriza el diálogo y los acuerdos, sin embargo, condenó los eventos ocurridos en la rectoría, calificándolos como una situación reprobable tanto para la institución como para la sociedad. «Esto no representa a nuestros egresados ni el esfuerzo de los maestros por formar a futuros profesionistas. La universidad está a favor del diálogo», afirmó Rivera Campos, quien también destacó la importancia de mantener una pluralidad de ideas y respeto entre todos los alumnos, siempre dentro del estado de derecho.
El rector también manifestó su compromiso con cumplir y respetar la decisión de un juzgado federal de no tomar protesta, y expresó su deseo de dialogar con los jóvenes, dejando el asunto en manos del poder judicial federal. Sin embargo, es notable que se le había informado del problema con anticipación, pero no le prestó la debida atención. Si hubiera mostrado interés, habría recibido a los estudiantes antes de que la situación se descontrolara. Algunos sugieren que los manifestantes, aunque renuentes, buscaban ser escuchados al estilo del MOSh de la UNAM. Según dicen, Rivera estaba en Aguascalientes y no consideró el tema importante, lo cual parece reflejar una falta de habilidad para manejar la situación, pese a su experiencia en el Instituto del Deporte.
Hasta que por fin le salió lo valiente al rector de la UACH, Luis Rivera Campos, luego de los desmanes que hicieron varios estudiantes y agregados en el edificio de Rectoría, quien declaró que se actuará en consecuencia contra los responsables de este acto de evidente vandalismo.
No tenía que pasar algo así para que al dirigente de la máxima casa de estudios de Chihuahua se pusiera los pantalones, porque se pudo haber evitado, ya que se veía venir que no había diálogo y las exigencias de que fuera totalmente gratis la inscripción no eran posibles a pesar de intentos civilizados.
Curiosamente, en Palacio de Gobierno se adelantaron al proteger ventanas y puertas, mientras que el histórico inmueble de la Universidad Autónoma de Chihuahua quedó vulnerable y ahí están las consecuencias.
También, el no haber solicitado seguridad a la autoridad fue un error, porque desde antes, se sabía que muchos de los que se estaban sumando, ni siquiera eran estudiantes. Se calculó que eran como 80 manifestantes y de estos, solo 15 son los que están dentro de la UACH.
Se supone que ahora, con investigaciones de videos de cámaras y grabaciones de medios de comunicación, así como redes sociales, se podrá identificar a los vándalos y fincarles responsabilidades, sin mencionar que debe haber detenidos y que lleven un proceso judicial.
A pesar de tener todo el respaldo del Gobierno del Estado, los de la UACH se dejaron intimidar desde los amparos presentados por un abogado antes morenistas y ahora candidato a diputado por Movimiento Ciudadano, que se los comieron totalmente.
Ni inscripción gratuita ni acuerdo; lo único que ocurrió fue el desastre causado, que deberá ser reparado, restaurado y eso le va a costar dinero a la misma institución educativa y peor, con parte del erario de los chihuahuenses, porque también reciben un subsidio por ley.
Ojalá, no vuelvan a tomar las cosas tan a la ligera y permitir que se les suban como hormigas a un pastel, para que realmente pese la autoridad universitaria, el Consejo, el rector y sobre todo, la educación.
En la grilla política, quien está más que feliz y despotrica en redes sociales, es Kike Valles, el candidato a la Presidencia Municipal de Chihuahua por Movimiento Ciudadano, que hasta sacó encuestas que lo posicionan en segundo lugar por encima de Miguel La Torre de Morena y solo poquito debajo de Marco Bonilla, el que va por la alianza entre el PAN, PRI y PRD.
Ha sido él mismo el que declaró que así andan y podría darse el milagrito. Un poco optimista, porque si hay posibilidad de que le gane en las urnas al morenista, pero aún está muy lejos de poder darle real batalla al alcalde panista con licencia, quien ya agarró mucho colmillo en estos tres años de su administración.
Otro detalle curioso en Kike es que puesto que el partido ha incluido a personas de la diversidad sexual, amantes de los animales y hasta feministas, mucho de su discurso lo ha basado en eso, pero se nota que le cuesta estar de acuerdo. Tan solo escucharlo y verlo decir “todes”, es algo que nadie le cree y se le nota lo incómodo.
Esto también le pasaría a Miguel La Torre si lo dijera (ojalá que no) porque aunque se quiera vestir de “popul vuh” con MORENA, se le nota que es aún más conservador, con la conservaduría conservadora de los conservadores panistas; incluso hasta más que el propio Marco Bonilla.
Esto, porque todos los que lo conocen, saben muy bien que nunca ha estado de acuerdo con estas tendencias y a pesar de estar en campaña, él no va a dejar de ser un aficionado taurino. Lo lleva en la sangre y ha sido de lo que ha vivido durante muchos años.
Quizás, cuando acabe este proceso electoral, nuestro buen Kike regrese a su “yo” verdadero y deje la faramalla para otros. Es inteligente, muy astuto en muchos aspectos y no necesita andar con la corriente nomás para un hueso; el problema, es que en la política, discursos hay, pensamientos vienen, pero nunca se conoce a nadie en realidad. No hay amigos y por lo que se ha visto en estas campañas, no hay fidelidad a las creencias, solamente la búsqueda del poder y por supuesto, del cash.
El que está que come ansias porque venga Claudia Sheinbaum a Chihuahua, es Miguel La Torre, quien anunció muy emocionado la próxima visita de la candidata a la Presidencia de la República, muy posiblemente la ganadora, porque le hace falta que le levante la campaña, que está más abajo que en el hoyo.
Está que se come las uñas para el próximo 22 de mayo esté la elegida por AMLO para sucederle, porque requiere urgentemente que despegue y tenga popularidad para ser competitivo en la votación; pero sobre todo, que los una porque están más divididos que los puestos cuando se gana una elección.
Solamente hay dos detalles que no pueden pasar por alto. Uno, es que Claudia no es Andrés Manuel y la popularidad de ella en Chihuahua no es la misma. Dos, que ella ha sido la principal causante de la división en MORENA a nivel nacional y la tendencia a la baja (lenta caída pero va pa’ abajo quizás en los próximos 6 años se vea más claro).
El pensar que la doctora va a unir a los separados candidatos militantes de MORENA en la capital, es un poco ingenuo, por lo que podría ser más contraproducente que benéfico para el partido a nivel local. Bueno, tenía que venir, así que eso no se pudo evitar.