El arresto de la alcaldesa de Nuevo Casas Grandes, Cynthia Marina C. D., ha destapado tres aspectos de gran relevancia. En primer lugar, la conexión alarmante entre la Policía Municipal y el crimen organizado parece extenderse más allá de lo que se pensaba, mostrando tentáculos que van más allá de la propia corporación. La desaparición de la secretaria del Ayuntamiento, Silvia Ivón Hernández, quien fue alertada y declarada prófuga, añade un elemento intrigante a la trama.
En segundo lugar, se revela que los abogados de Cynthia Marina y Silvia Ivón tenían vínculos con la Fiscalía Anticorrupción durante la administración pasada. Este conflicto de intereses plantea interrogantes sobre la imparcialidad del proceso y destaca la necesidad de examinar las conexiones dentro de las instituciones encargadas de la justicia. Finalmente, el tercer aspecto subraya la incertidumbre sobre quién asumirá el cargo de manera interina en el municipio, dado que la alcaldesa y su suplente están bajo arresto. Esta situación, a pocos meses de las elecciones, deja al Cabildo con la responsabilidad de designar a un sustituto, un proceso que podría generar tensiones y disputas en el ámbito local.
El escenario político no se queda atrás en el juego de señalamientos y acusaciones, y la maquinaria del PAN Estatal ha puesto en marcha su estrategia para destacar la corrupción dentro de la 4T. Sin embargo, las respuestas de los representantes de Morena no se quedan atrás, y la acusación de persecución es la primera carta en su defensa. La habilidad para atacar y defenderse se pone a prueba, y en este juego, el diputado morenista Oscar Castrejón parece haberse enredado en sus propias palabras al confundir la afiliación política de la alcaldesa señalada de peculado, inicialmente vinculándola al PT y después recordando su paso por Morena.
La situación se complica aún más al recordar que la legisladora Jael Arguelles, compañera de Castrejón, también transitó del PT a Morena. Estos enredos plantean interrogantes sobre la coherencia y la selección de miembros en la bancada de Morena, dejando a Castrejón vulnerable a cuestionamientos sobre por qué aceptan a personas señaladas de corrupción del PT en sus filas. En el juego político local, la inteligencia no solo radica en los ataques sino también en la habilidad para no caer en contradicciones que pongan en entredicho la integridad y coherencia del partido.
Tras un lunes marcado por la detención de la alcaldesa de Nuevo Casas Grandes y su posterior audiencia en Chihuahua capital, el foco de la política local se traslada hoy al poblado de Cuchillo Parado, en Coyame del Sotol, donde la gobernadora Maru Campos encabezará los festejos por el inicio de la Revolución Mexicana. Este evento, que reunirá a los líderes de los tres Poderes, Legislativo, Judicial y Ejecutivo, destaca como escenario propicio para la reflexión política.
La gobernadora, en un mensaje contundente, lanzó una advertencia a los 66 alcaldes del estado, enfatizando que la caída de la alcaldesa de Nuevo Casas Grandes refleja que nadie quedará exento de las consecuencias por actos de corrupción o vínculos con el crimen organizado. Estas declaraciones toman un significado especial en el contexto actual, donde el fiscal Anticorrupción, Abelardo Valenzuela, ha intensificado sus esfuerzos para perseguir a aquellos involucrados en prácticas corruptas. En este escenario, la política local se ve envuelta en una nueva dinámica, donde la transparencia y la rendición de cuentas emergen como elementos clave en la agenda política de Chihuahua.