Eduardo Antonio Zendejas Amparán, secretario general de la Sección 8 del SNTE, no pierde oportunidad para pedir. Esta vez, durante la toma de protesta de Marco Bonilla para su segunda administración como alcalde de Chihuahua, se dedicó a felicitarlo, claro, con el eterno «pero» de seguir invirtiendo en escuelas y educación. Con la marca del sindicalismo bien tatuada, Zendejas insiste en solicitar apoyos para la infraestructura escolar, becas y espacios dignos para los docentes, como si de tanto pedir se fueran a solucionar todos los problemas del sistema educativo.
Sin embargo, resulta paradójico que mientras Zendejas se la pasa pidiendo, parece olvidar que lo que realmente se necesita es capacitar a los maestros con herramientas modernas y efectivas. El respaldo a la administración de Bonilla es un «refrendo» que suena más a presión que a verdadera colaboración; porque, al final del día, lo único que parece saber hacer este líder sindical es pedir, cuando lo que debería estar haciendo es impulsar una verdadera mejora en la calidad educativa desde dentro, formando a los docentes para enfrentar los retos actuales.
Marco Bonilla anunció la construcción de tres nuevos puentes en la ciudad para mejorar el tránsito, en lugares estratégicos como la Avenida Fuerza Aérea y la carretera Aldama. Aunque estas obras son necesarias, sería bueno que también se considerara el mantenimiento de vialidades deterioradas, como la Melchor Guaspe en el sur de la capital.
El alcalde prometió aumentar un 50% la inversión en obra pública respecto a la administración anterior y destacó proyectos como el Parque Lineal Sacramento. Sin embargo, mientras se piensa en el futuro, no hay que olvidar que muchas calles de la ciudad están en pésimas condiciones y necesitan atención inmediatal, solo mencionaremos una de las cientos de calles que existen en la ciudad la Melchor Guaspe, esa está hecha garras.
Por cierto, para los que fueron a la toma de protesta en la capital del estado, vaya que fue un calvario porque no solamente se retrasó ¡ 2 HORAS !, sino que apenas una botellita de agua les dieron a los invitados quienes ya estaban cansados de esperar y más que poner atención, lo que querían es irse.
Pos no más agua, ni brindis, ni catering, ni nada, nuevamente, la falta de respeto del Ayuntamiento de Chihuahua con los invitados se está haciendo notar; algo está pasando con Relaciones Públicas, que les está fallando y tuvieron a más de 2 mil asistentes en Expo Chihuahua muy molestos; tachita…Otra vez.
Lo único bueno fue escuchar a los talentosos niños de la Orquesta Sé-wá, con canciones bien ejecutadas, pero también muy cansado y mas por estar sentados en silla algo incomodas para tanto tiempo; ojalá el alcalde les ponga en cintura o que quite a quien tenga que quitar para que no ocurra estas basofias
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