Aun cuando se está fuera del proceso formal de campañas hacia las elecciones de junio del año entrante vaya que ninguno de los partidos debidamente registrados ante el Instituto Nacional Electoral y a los cuales nos debemos, gusten o no, vaya que hay sorpresas y desaguisados.
Al otrora arrollador Partido de la Revolución Democrática (PRD), organismo que a pulso ha quedado en calidad de globo en proceso de desinfle casi total, está que se le queman las tortillas porque en el Frente Amplio por México, en el que participa junto con el PRI y PAN, ninguno de sus aspirantes quedó en la terna a la sucesión presidencial del 2024.
Y no se vale, reclaman con los puños cerrados Silvano Aureoles y Miguel Ángel Mancera, que no los calienta ni la morisqueta de Michoacán al primero y el bolillo con tamal al segundo.
En vía de mientras el dirigente perredista, Jesús Zambrano, ya dijo que de ninguna forma se salen del referido Frente aunque eso sí, firme, no firmes ya, quiere aclaraciones suficientes en torno a la causa de la baja de ambos gallos de su partido.
Y claro que el PRD no se va ni lo van, de ninguna manera dejará solitarios ni al frente ni a los cuatro elegido a seguir con el método de selección de candidato único –dos del PAN, dos del PRI- a la presidencia, pues que se creen, la unidad ante todo.
Y de paso un abandono de esa magnitud los dejará no únicamente solos sino hasta con riesgo de perder definitivamente su registro y eso sí que nanai, como dicen los chavales -nel en la prehistoria- pues con todo y que han ido a la baja aún le tocan de financiamiento federal sólo para actividades ordinarias y otras cerca de 500 millones este 2023.
Así que salirse salirse, no, reclamar y reclamar, sí.
Ante tales dilemas Jesús Zambrano le dice a Morena no y al Frente por supuesto que sí, así que, diría el ya muy desdibujado Lenin, digo Zambrano ¿qué hacer?
Atraques
1. Más allá de los índices a la baja en la criminalidad registrados en el país – que nunca están de más- la estela de desconcierto de miles de familias persiste, ni se diga de feminicidios, la vergüenza ocurrida en León, de la joven Marisol.
2. La agenda política y pública de la educación va más allá de los libros de texto, pues vaya que de casi 30 millones de alumnos de educación básica, media superior y normales inscritos en el ciclo 2022-2023 se distribuyen así: 24.5 educación básica; 5.2 media superior y 124.7 en las normales. Luego en educación superior se suman: 5.1 millones. El llamado cuello de botella que urge, más ahora con la inteligencia artificial, revertir.
3. De tarea: El rector del Tecnológico de Monterrey, David Garza, asegura que se deja la universidad por la multidiversidad. “La pandemia nos enseñó a abrirnos y a colaborar con otras instituciones; también será multidimensional, porque hoy estamos viendo con la evolución de la inteligencia artificial que los jóvenes no solamente deben de crecer intelectualmente, sino también en otras dimensiones como la espiritual, la emocional y la física”.