Rusia acusó a Francia de “negarse a cooperar” tras la detención del fundador de Telegram, Pavel Durov, quien cuenta con ambas nacionalidades. Las autoridades rusas señalaron que habían solicitado acceso a Durov, pero no obtuvieron respuesta de las autoridades francesas, mientras que al menos 15 legisladores rusos exigieron su liberación.
«Pedimos inmediatamente a las autoridades francesas que explicaran las razones de esta detención y exigimos que se protegieran sus derechos y se concediera acceso consular. Hasta ahora, la parte francesa se niega a cooperar en esta cuestión”, declaró la embajada de Rusia en París.
La ministra de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajárova, confirmó que Moscú había pedido que Durov pudiera ser apoyado por su diplomacia en París, pero que, como tiene también la nacionalidad francesa, “Francia considera que es su nacionalidad principal”.
Vladislav Davankov, vicepresidente de la Duma en Rusia, afirmó que el arresto de Durov “puede tener motivos políticos y ser una herramienta para acceder a información personal de los usuarios de Telegram. Esto no se puede permitir”, por lo que, añadió, “hay que sacarlo” de la cárcel.
«En un comunicado, Telegram declaró que su director ejecutivo “no tiene nada que esconder y viaja frecuentemente a Europa”.
«Telegram cumple las leyes de la Unión Europea, incluida la Ley de Servicios Digitales. Sus acciones de moderación están dentro de los estándares de la industria”, indicó la compañía con sede en Dubái en un comunicado a través de la aplicación.
«Es absurdo afirmar que una plataforma o su propietario son responsables de los abusos” en dicha plataforma, añadió.
La agencia francesa de prevención de la violencia contra los menores, OFMIN, había emitido una orden de arresto contra Durov como parte de una investigación preliminar sobre varios delitos, incluyendo fraude, tráfico de drogas, acoso cibernético, crimen organizado y promoción de terrorismo, siendo sospechoso de no tomar acciones para impedir el uso de la plataforma Telegram con fines criminales.
El juez encargado de la investigación prolongó el ayer su detención preventiva, que puede durar 96 horas como máximo, según otra fuente cercana al caso. Después, Pavel Durov podría ser puesto en libertad o presentado ante este magistrado con vistas a una posible acusación.
Por su parte, la Defensora del Pueblo en Rusia, Tatiana Moskalkova, afirmó que el caso busca el cierre de Telegram, “donde se puede conocer la verdad de lo que ocurre en el mundo”.
El empresario y dueño de la red social X, Elon Musk, publicó el hashtag #FreePavel (#PavelLibre) y comentó en francés “Liberté Liberté! Liberté?” (¡Libertad Libertad! ¿Libertad?), en su cuenta de su propia plataforma.
Asimismo, el magnate afirmó: “Estamos en 2030 en Europa y te ejecutan porque te gusta un meme”.
Por su parte, el excolaborador del gobierno de EU, Edward Snowden también lamentó la detención.
«La detención de Durov es un atentado contra los derechos humanos básicos de expresión y asociación. Me sorprende y me entristece profundamente que Macron haya llegado al punto de tomar rehenes como medio para acceder a comunicaciones privadas. Esto no sólo degrada a Francia, sino al mundo”, expresó en su cuenta de X.
Telegram permite grupos de hasta 200 mil miembros, lo que provocó acusaciones de que facilita la propagación viral de información falsa, así como que los usuarios difundan contenidos neonazis y pedófilos.
La red introdujo límites mundiales al reenvío de mensajes en 2019 después de que se le acusara de permitir la difusión de información falsa en India que provocó linchamientos.