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Con un avance del 80% en el proyecto de ampliación del Centro de Reinserción Social para Adolescentes Infractores (CERSAI) No. 2 y la reubicación del Centro de Reinserción Social (CERESO) Femenil No.2 en Ciudad Juárez, se busca que ambos espacios operen de manera independiente en términos de administración, gobierno y la convivencia de las Personas Privadas de la Libertad (PPL), con el objetivo de garantizar la seguridad y el funcionamiento adecuado de cada uno.
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Denisse Lysett Lozano Aubert, directora del CERSAI No. 2, explicó que la infraestructura ha sido diseñada estratégicamente para que cada centro cuente con sus propios espacios, incluyendo áreas de ingresos, salones de clases, comedor y vinculación, además de estacionamientos separados con la finalidad de facilitar el acceso de familiares durante las visitas.
Para evitar cualquier contacto entre ambas poblaciones, se han implementado medidas de seguridad estrictas, tales como paredes divisorias, mallas reforzadas, concertinas y cortinas en puntos estratégicos que impiden la visibilidad entre los centros.
Lozano Aubert destacó que estos proyectos se están desarrollado con una visión integral para fortalecer el sistema penitenciario y asegurar condiciones óptimas dentro de cada institución.
«Estamos trabajando arduamente en todas las áreas de seguridad a fin de evitar cualquier tipo de conflicto o vulnerabilidad de los PPL. Son proyectos que se contemplan a corto, mediano y largo plazo, que es algo que se sigue trabajando», señaló Lozano Aubert.
Actualmente, la construcción se encuentra en su fase final y se prevé su apertura durante el primer semestre del año. El tiempo adicional de trabajo permite integrar nuevas oficinas específicas para cada centro, lo que es necesario para optimizar su operatividad.
Con estas mejoras, el nuevo CERESO Femenil No. 2 evitará la sobrepoblación, mientras que las ampliaciones en el CERSAI No. 2 permitirán aumentar su capacidad para albergar hasta 160 menores infractores.
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