Un módulo privado estadunidense logró alunizar este jueves, aunque los equipos de control trabajan para evaluar su estado, e incluso si se halla en posición vertical, informó un portavoz de la compañía.
En su segundo intento de alunizaje, la empresa Intuitive Machines envió un módulo de aterrizaje hexagonal Athena de 4.8 metros de altura a la vasta meseta de Mons Mouton, más cerca del polo sur lunar que cualquier misión anterior.
Su objetivo era que el aparato tocara la superficie lunar a las 12:32 (local).
Veinte minutos después de la hora de alunizaje prevista, el portavoz de la compañía, Josh Marshall, anunció en una transmisión web: «Athena está en la superficie de la Luna».
Sin embargo, los equipos todavía estaban analizando los datos entrantes para evaluar el estado del módulo.
«Estamos trabajando para determinar la orientación del vehículo», agregó Marshall, antes de que la transmisión en vivo terminara abruptamente.
La misión está diseñada para probar una serie de tecnologías avanzadas que podrían respaldar futuras misiones lunares tripuladas, incluido un sistema de perforación de hielo, un experimento de red 4G, tres exploradores y un dron saltador, el primero de su tipo.
La presión sobre la empresa era alta después de que Firefly Aerospace, una compañía de Texas, lograra que su módulo Blue Ghost alunizara apenas unos días antes, el domingo.
Ambas son parte del programa de Servicios de Carga Lunar Comercial (CLPS) de la agencia espacial estadunidense NASA de 2 mil 600 millones de dólares, que tiene como objetivo aprovechar la industria privada para reducir costos y apoyar a Artemis, el esfuerzo de la NASA para volver a llevar astronautas a la Luna y, eventualmente, llegar a Marte.