Una mudanza de sus operaciones de carga del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) implicaría un desembolso directo e inmediato de cuando menos 100 millones 500 mil pesos para poder iniciar trabajos en esta nueva terminal aérea, aseguró Estafeta Mexicana, S.A. de C.V. y Estafeta Carga Aérea, S.A. de C.V en un comentario dirigido a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer).
En esta instancia se analiza un anteproyecto de decreto enviado por el presidente Andrés Manuel López Obrador que establece que el AICM debe cerrar sus operaciones comerciales de carga ante la saturación del espacio aéreo y de sus terminales 1 y 2.
“Es preciso señalar que se estima que, para poder atender el objeto del anteproyecto de Decreto, Estafeta tendría que asumir de manera directa, inmediata y mediata, un costo total de aproximadamente $100’500,000.00 de pesos mexicanos, por lo menos y únicamente para poder iniciar operaciones en un aeropuerto alterno”, indicó la empresa.
“A los costos antes descritos, habría que sumar aquellos que se deriven de las terminaciones de las relaciones contractuales entre Estafeta y diversos clientes, así como proveedores, para quienes la movilización de las operaciones a un aeropuerto distinto del AICM no fueran aceptables por diversas razones”, añadió.
La Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) hizo un cálculo que ronda los 9 millones 600 mil pesos del costo que tendrían que asumir las 16 compañías cargueras que operan en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) para mudar sus operaciones y centros fiscalizados al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
Aunque no consultó a los grupos de interés aéreo y señaló que no cuenta con información puntal sobre el valor, la cantidad, dimensiones y equipo con el que cuentan los 16 concesionarios y permisionarios de carga en el AICM, la AFAC expuso que por mano de obra, reubicación de bienes y equipo, los particulares podrían desembolsar la cantidad de hasta 600 mil pesos cada una.
En una extensa postura, Estafeta detalló que por mudarse al AIFA tendría que construir instalaciones para la infraestructura operativa para intercambio y clasificación de envíos. La superficie de la nave debe tener, por lo menos, una superficie similar a la que ocupa en el AICM, considerando que esa nave estuviera disponible para renta en otro aeropuerto.
“Hoy en día no existen instalaciones que cumplan con las características requeridas por Estafeta, las mismas se deben construir, para lo cual 90 días hábiles no es un plazo viable, dadas las características e instalaciones especializadas que ésta debe tener”, advirtió.
“Además, dicha construcción implica un costo de, por lo menos, $35’000,000.00 de pesos mexicanos. Por otro lado, un gasto de gran importancia y que es absolutamente necesario se deriva del hecho de que, en la nave mencionada, Estafeta debe instalar infraestructura operativa diseñada y fabricada específicamente para el nuevo espacio”.
También, la firma expuso que para el diseño especializado de esta nave, así como su equipamiento, que requiere de materiales manufacturados fuera del país, se desembolsarían alrededor de 20 millones de pesos entre su manufactura e instalación.
“Lo anterior, sin considerar las terribles afectaciones económicas, jurídicas y sociales que se generarían para decenas de miles de usuarios del servicio de mensajería, como consecuencia de detener las operaciones en el AICM, sin que empiecen en otro lugar de manera ordenada y planeada”, detalló.
Además, advirtió que para poder operar fuera del AICM e incorporarse en el AIFA será necesario compensar la distancia desde dichos aeropuertos hacia los centros de distribución, adicionando a la red de Estafeta en promedio 40 vehículos de última milla.
“Cada uno de esos vehículos tiene un costo de aproximado de $1’000,000.00 pesos mexicanos más IVA, lo que se traduce en una inversión de $40’000,000.00 de pesos mexicanos más IVA únicamente en vehículos”.
Esta mañana, el presidente López Obrador anunció que DHL México iniciará operaciones en el AIFA hacia finales del próximo mes, por lo que el decreto para cerrar el AICM a la carga entrará en vigor cuando mucho en la primera semana de marzo.
Cuestionado sobre la petición de las cargueras de ampliar el plazo de la mudanza a por lo menos un año, el mandatario rechazó esta propuesta al justificar que las empresas solo buscan brincarse la norma, puesto que su administración está cerca de concluir.
Para este propósito, la autoridad aeronáutica planteó que una vez que entre en vigor esta nueva normativa, las empresas cargueras deben mudarse al AIFA en un plazo máximo de 90 días.
Al respecto, la carguera advirtió que con este tiempo, es imposible que la empresa concrete la mudanza al nuevo aeropuerto, toda vez que tiene que construir infraestructura especializada, tal y como la que tiene en el AICM, por lo que pidió ampliar este término a 16 meses.
“Dicho tiempo se debe entender como contado de la entrada en vigor del decreto cuyo anteproyecto se comenta. En virtud de lo antes expuesto, Estafeta requeriría, por sus características distintivas y los servicios que brinda, un plazo mínimo de 16 meses o 480 días para estar en posibilidad de movilizarse e iniciar sus operaciones en un aeropuerto distinto al AICM”, señaló la compañía.