Un estudio reciente revela que cerca de la mitad de la Generación Z en Estados Unidos desearía que plataformas populares como TikTok (47%) y X, anteriormente Twitter (50%), nunca hubieran existido, a pesar de pasar varias horas diarias en ellas.
Los resultados provienen de una encuesta realizada a más de mil adultos de entre 18 y 27 años por el psicólogo social Jonathan Haidt y Harris Poll. La investigación muestra que la naturaleza adictiva de los teléfonos inteligentes y las redes sociales está afectando a muchos jóvenes, quienes pasan, en promedio, cuatro horas al día en estas plataformas.
Haidt, autor del libro «La generación ansiosa», compartió los resultados en un artículo de opinión para The New York Times, destacando las preocupaciones sobre el uso excesivo de redes sociales entre la Generación Z. Según el estudio, el 60% de los encuestados pasa al menos cuatro horas al día en redes sociales, y el 23% afirma pasar más de siete horas diarias en estas plataformas.
“La cantidad de tiempo que estos jóvenes dedican a las redes sociales es asombrosa”, afirmó Haidt.
A pesar del tiempo dedicado, el estudio muestra que muchos jóvenes perciben un impacto negativo de las redes sociales en la sociedad. Un 60% considera que las redes sociales dañan a la sociedad, mientras que solo el 32% cree que tienen un efecto positivo. En cuanto a sus vidas personales, el 52% señala que las redes sociales han tenido un impacto positivo, aunque un 29% afirma lo contrario.
Las mujeres y los miembros de la comunidad LGBT+, según el estudio, experimentan más efectos negativos en su salud mental que otros grupos. Un 44% de las mujeres y un 47% de los encuestados LGBT+ señalaron que las redes sociales han afectado negativamente su bienestar mental, en comparación con el 31% de los hombres y el 35% de los encuestados no LGBT+.
Entre las plataformas que los jóvenes desearían que nunca se hubieran inventado, X y TikTok encabezaron la lista, seguidas por Snapchat (43%), Facebook (37%) e Instagram (34%). Curiosamente, el estudio reveló que la Generación Z no tiene tantas quejas sobre las funciones más básicas de Internet, como el envío de mensajes de texto, ver películas o buscar información.
Solamente un 21% expresó desear que los teléfonos inteligentes no existieran, mientras que aplicaciones de mensajería (19%) y servicios de streaming como Netflix (17%) y YouTube (15%) obtuvieron las puntuaciones más bajas.
“Si los teléfonos inteligentes solo permitieran enviar mensajes de texto, ver películas o buscar información sin algoritmos diseñados para enganchar a los usuarios, habría mucho menos arrepentimiento y resentimiento”, explicó Haidt.
El estudio también revela que, aunque solo el 36% de los encuestados apoya la prohibición total de redes sociales para menores de 16 años, un 69% está a favor de una legislación que exija a las empresas crear opciones seguras para usuarios menores de 18 años.
Esta medida está siendo evaluada actualmente por la Cámara de Representantes de Estados Unidosbajo la Ley de Seguridad Infantil en Línea, la cual obligaría a las empresas de tecnología a desactivar las funciones adictivas y permitir a los usuarios desactivar los algoritmos personalizados.
Haidt concluye su análisis con una analogía: “Si los walkie-talkies estuvieran dañando a millones de jóvenes, y un tercio de ellos deseara que no existieran, pero siguieran sintiéndose obligados a usarlos durante cinco horas al día, tomaríamos medidas para protegerlos”. Según él, las empresas de redes sociales deberían ser obligadas a hacer lo mismo: garantizar la seguridad de sus productos o dejar de ofrecérselos a los niños.