El mundo de hoy con sus múltiples contradicciones es la constante en la realidad histórica del hombre. Mientras una parte del planeta lucha por la supervivencia, en otras latitudes la abundancia es agobiante. Pero si algo caracteriza a nuestro tiempo es la inmediatez de las comunicaciones, que incluso han estandarizado el ideal social, la cultura, perdiéndose poco a poco la identidad regional específica que ha sido la riqueza de la multiculturalidad, incluso en cada país. Aunque hay muchas iniciativas para rescatar estas manifestaciones que otorgan carácter a cada grupo y persona en sí misma.
Las comunicaciones han vuelto indispensables a las redes sociales, a veces a nivel casi adictivo, pero promueven la solidaridad, la empatía, como hemos visto en la guerra de Ucrania y más recientemente con los terremotos en Turquía y Siria, la ayuda humanitaria sigue fluyendo, lo que difícilmente sucedería hace un par de siglos.
Y algo que está revolucionando nuestro sentido de la realidad, nuestra cosmogonía es la ciencia ficción, que en estos tiempos puede confundirse fácilmente con una realidad intangible, paralela, pero comprobable, gracias a la física cuántica, en la que se han inspirado para producir películas como Matrix, Código Fuente, Coherence, Interestelar, Tomorrowland, La Llegada, Avatar, Todo en Todas Partes a la Vez, esta última nominada al premio Oscar de la Academia en Hollywood, una película que considerando la trama, resulta un verdadero absurdo, pero los críticos seguramente se enfocan en lo asombroso de la física cuántica, que seguro revolucionará nuestra vida en el corto o mediano plazo.
Pero, ¿qué es eso de la Física Cuántica? Aunque no hay unanimidad respecto a una definición, podemos decir que es la ciencia que estudia el comportamiento de la naturaleza a nivel subatómico, en donde las partículas que ahí se encuentran no responden a las leyes de la relatividad general, ya que las leyes físicas clásicas no pueden explicar su comportamiento, así que las reglas del juego son muy diferentes y desafían al más elemental sentido común. Por lo que la Física Cuántica se enfoca en analizar las interacciones entre las distintas partículas subatómicas y que explican la naturaleza más primitiva de las cuatro fuerzas principales del Universo la gravedad, el electromagnetismo, la nuclear débil y la nuclear fuerte.
Es así que el mundo cuántico requiere de nuevas ecuaciones matemáticas, enfoques y nuevas leyes. Su estudio visualiza lo más pequeño y primitivo del Cosmos, a través del cual podemos acceder al conocimiento de la naturaleza más fundamental del Universo. Aquí caben ideas antes tan fantasiosas como los viajes en el tiempo, los mundos paralelos, las comunicaciones telepáticas y los viajes astrales, aunque sobran testimonios de ello, la ciencia oficial no ha contado con herramientas experimentales de corroboración
Es por ello que la Física Cuántica no sólo se refiere a las ciencias exactas, sino que incide en nuestras concepciones filosóficas y ontológicas más profundas, nuestros sistemas de organización como sociedad, nuestras creencias, convicciones e identidad.
Muchas son las aplicaciones de la Física Cuántica, se usa en las fotoceldas, sistemas de navegación y cronometraje, comunicaciones, imagenología médica, supercomputación, criptografía, para le energía nuclear, relojes atómicos, láseres, resonancia magnética, semiconductores, televisión, ciberseguridad, etc.
Como sabemos, la ciencia es neutral, así que se puede utilizar para fines nada éticos, pero también para causar daño, lo hemos visto con la bomba atómica, por lo que muchas veces los avances científicos se han estigmatizado. En el imaginario colectivo vemos a la energía nuclear como un alto riesgo para la humanidad, aunque a través del uso de esa tecnología se pueda producir energía limpia, a bajo costo y tanta que podría superar las necesidades actuales del mundo.
Sin embargo, debemos reconocer que si bien es gracias a los conflictos bélicos que se han logrado avances significativos en la ciencia y tecnología, también este incentivo continúa siendo el motor que mueve a la Física cuántica.
Respecto de los globos aerostáticos chinos encontrados recientemente en Canadá, Estados Unidos y América Latina, la Revista Forbes dio a conocer como este globo espía es sólo un ejemplo de la guerra tecnológica de este siglo. El Pentágono lleva años buscando cómo utilizar la Física Cuántica en su carrera armamentista, ya sea con el desarrollo de sistemas informáticos más poderosos, reforzando el GPS, la ciberseguridad, o creando sistemas alternos de vigilancia que tengan mayor capacidad de detección para submarinos atómicos que se encuentran en búnkeres subterráneos.
El sistema de posicionamiento global es una de las prioridades, puesto que sin esta herramienta tan indispensable en la navegación, se crearía un caos inimaginable, por lo que se está trabajando en sistemas de navegación mejorados cuánticamente que permitan a aeronaves y barcos mantener el rumbo en caso de una falla del GPS. Para ello se requieren relojes atómicos precisos, por ejemplo.
En esto están los Estados Unidos y China, por lo que el gasto de investigación se ha duplicado. En el 2019 se destinaban 449 millones de dólares y para el 2022 el gasto aumentó a 918 millones de dólares. Independientemente de que existen empresas nuevas dedicadas al desarrollo de la energía cuántica, que gastaron unos 870 millones de dólares el año pasado, principalmente en el desarrollo de computadoras cuánticas.
La computación clásica se basa en bits, que son uno o cero, la computación cuántica utiliza partículas subatómicas como “qubits”, que pueden ser uno y cero al mismo tiempo o proposiciones intermedias, gracias a lo que se podrían resolver rápidamente problemas complejos que están fuera del alcance de las máquinas convencionales.
Estas tecnologías todavía se encuentran en proceso, pero se estima que en una década serán una realidad, por lo que se tendrían acelerómetros y giroscopios, así como dispositivos que detectan cambios minúsculos en la fuerza de gravedad y campos magnéticos.
Se ha especulado que la tecnología china en la magnetometría cuántica podría desplegar una red de dispositivos aerotrasportados para detectar submarinos a gran distancia, por lo que se piensa que los gravímetros y magnetrómetros cuánticos puedan mapear con mayor precisión características subterráneas como depósitos de petróleo y minerales, niveles freáticos, búnkeres y túneles. Y ya hemos visto tecnología similar utilizada por científicos que han hecho descubrimientos arqueológicos impactantes.
La amenaza china en la computación cuántica ya ha impactado la ciberseguridad, por lo que los expertos en seguridad nacional consideran que China y otros países están recopilando comunicaciones encriptadas y datos confidenciales en espera de que las computadoras cuánticas sean lo suficientemente poderosas como para descifrar su encriptación.
Día a día la competencia por la supremacía es más intensa; y mientras, el mundo gira enfrentando los muy diversos desafíos naturales y sociales, como vemos, incendios, inundaciones, terremotos y la guerra, en una lucha por el poder sin tregua. La naturaleza humana con sus singularidades.