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En Pekín, China hizo un desfile militar grandote para celebrar los 80 años del fin de la Segunda Guerra Mundial.
El presidente Xi Jinping estuvo presente, acompañado por los líderes de Rusia y Corea del Norte, Putin y Kim Jong-un.
Mostraron armas nuevas, como misiles, drones con inteligencia artificial y aviones de alerta temprana.
Xi Jinping dijo que “el gran rejuvenecimiento de la nación china es imparable”.
Este evento dejó claro que China quiere mostrar que es una potencia mundial militar y política.
También subrayaron que siguen modernizando sus fuerzas armadas para estar listos para cualquier reto.
La presencia de Putin y Kim Jong-un le dio un toque político fuerte al desfile.
Muchos países están atentos a lo que está haciendo China en su región y en el mundo.
Este desfile es una muestra de poder y un mensaje directo a otras potencias.
Las tensiones internacionales podrían aumentar si China sigue creciendo su ejército así de rápido.







