Ciudad de México.- Un hombre asesinó a quemarropa a una mamá adolescente de 16 años y a su bebé de 10 meses, luego de que atacó a balazos a una comunidad agrícola en el condado de Tulare, ubicado en el centro de California, donde seis personas más murieron en una residencia vinculada con drogas y armas de fuego.
El jefe de policía del condado de Tulare, Mike Boudreaux, dijo que la joven intentaba escapar del tiroteo la madrugada del lunes cuando los atacantes le dieron alcance afuera de su casa en Goshen —una comunidad de unos 3 mil habitantes en la región agrícola de San Joaquin Valley, en el centro de California— y ejecutaron a la madre y a su bebé.
Las otras cuatro víctimas, de entre 19 y 72 años, incluían a una adulta mayor que fue baleada mientras dormía.
Las autoridades indicaron que se tiene previsto que las necropsias se completen en los próximos días.
Las autoridades indicaron que buscan a dos sospechosos y ofrecieron una recompensa de 10 mil dólares por información que resulte en sus detenciones.
«Nada de esto fue un accidente. Fue deliberado, intencional y horrendo«, dijo Boudreaux en conferencia de prensa
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Boudreaux se retractó de sus comentarios previos a la prensa de que el ataque posiblemente había sido obra de un cártel, diciendo que los investigadores también analizan la posibilidad de que fuera violencia de pandillas.
«No elimino esa posibilidad. Estas personas claramente fueron baleadas en la cabeza y también en lugares en donde el agresor sabría que ocurriría una muerte rápida. Esto también es parecido a la pertenencia a altos rangos en las pandillas y el tipo de ejecuciones que cometen«, afirmó.
Las autoridades estaban familiarizadas con la residencia, dijo Boudreaux, señalando que en el lugar había ocurrido actividad de pandillas de forma habitual.
Añadió que no todas las víctimas vendían drogas o pertenecían a pandillas, e indicó que entre las víctimas que se cree que eran inocentes se encuentran la joven, su abuela y, desde luego, el bebé.
Con Información de: Milenio.com.mx