Los electores estadounidenses están de acuerdo en cobrar aranceles a bienes importados desdeChina, como propone el candidato republicano Donald Trump.
De acuerdo con una encuesta realizada por Reuters/Ipsos, 56% de los votantes registrados dijeron que era más probable que apoyen a un candidato que respalde un nuevo arancel o impuesto del 10% sobre todas las importaciones.
Además, están a favor de cobrar un impuesto de hasta 60% sobre las importaciones procedentes del país asiático.
Los aranceles a productos procedentes de China son una de las principales propuestas de campañadel candidato republicano.
No obstante, la tendencia de respaldo a los aranceles se mantiene incluso en los votantes demócratas.
La encuesta reveló que uno de cada tres simpatizantes de este partido dijo que era más probable que votara por un candidato que respaldara aranceles más altos y fuertes impuestos a los productos chinos, en comparación con dos tercios que dijeron que era menos probable que lo hicieran.
Hasta que la pandemia devastó la economía mundial en 2020, la economía estadunidense tuvo un buen desempeño durante la administración Trump.
El desempleo estaba en su nivel más bajo en décadas, aunque la deuda nacional estaba aumentando.
TRUMP PROPONE RECORTE A IMPUESTOS
Este año, Trump ha prometido una serie de recortes de impuestos en la campaña electoral, incluido el fin del impuesto sobre la renta sobre los ingresos por propinas, una propuesta que Kamala Harris también apoya.
Incluso, la semana pasada, el magnate republicano prometió eliminar los impuestos sobre el pago de horas extra.
Tan es así que, según expertos, el tema económico es prioritario en el proceso electoral del 5 de noviembre.
«Esto es lo que mantiene la elección tan reñida”, dijo Karlyn Bowman, experta en encuestas del American Enterprise Institute, en referencia a las propuestas de ambos candidatos.
Bowman dijo que la ventaja de Trump se deriva de la percepción de que la economía funcionó bien durante su administración, entre 2017 y 2021, así como de su éxito al convencer a los votantes de que los problemas económicos del país se derivaban de la competencia de otros países como China.