Noticias Chihuahua:
El nuevo presidente interino de Perú, José Jerí, declaró un estado de emergencia de 30 días en Lima y el puerto del Callao, debido al aumento de homicidios, extorsiones y protestas lideradas por jóvenes.
La medida autoriza la participación de las fuerzas armadas junto con la policía nacional en operativos de seguridad. Jerí afirmó que el gobierno pasará “de la defensa a la ofensiva” en la lucha contra el crimen organizado.
La decisión llega tras manifestaciones en varias ciudades que dejaron un muerto y más de cien heridos, lo que generó una fuerte presión social para tomar medidas urgentes.
El decreto incluye controles de movilidad ciudadana, patrullajes militares en zonas urbanas y acciones especiales en prisiones para frenar a las bandas que operan desde dentro.
Sin embargo, expertos advierten que en el pasado medidas similares no lograron frenar la violencia de manera duradera. Algunos temen que se repita el mismo patrón.
Según encuestas recientes, más de la mitad de los peruanos considera la inseguridad como el problema más grave del país. Las extorsiones y los secuestros han aumentado especialmente entre trabajadores del transporte y comerciantes.
La situación política también influye. Jerí asumió el poder tras la destitución de Dina Boluarte, criticada por su falta de respuesta ante la crisis de seguridad.
Diversos organismos internacionales observan con atención el desarrollo de esta medida, ya que el uso de militares en tareas civiles puede generar tensiones sobre los derechos humanos.
El gobierno promete resultados rápidos, pero la población espera ver si esta vez el estado de emergencia logra reducir realmente la violencia.







