Noticias de Nuevo Casas Grandes. –
La Fiscalía General de la República (FGR) efectuó el pasado jueves 17 de enero un operativo en el campo menonita El Capulín, ubicado cerca del municipio de Nuevo Casas Grandes. En coordinación con la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, confiscaron dos cisternas de gasolina utilizada para trabajo agrícola, bajo el argumento de que fue extraída de las tuberías de Petróleos Mexicanos (Pemex).
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Los productores demostraron la adquisición legal del combustible ante las acusaciones de huachicoleo. Sin embargo, el comandante de la FGR, Alfredo Cruz Pérez, le ordenó a un hombre identificado como José Alfredo L. D., de 41 años, que retirara la cisterna, con un almacenamiento de casi 15 mil litros, a bordo de una unidad de Pemex. Y esta medida ocasionó un conflicto con los productores.
«En esta región los campos menonitas están alejados de la ciudad. Entonces ellos, para poder moverse, lo almacenan. Compraron legalmente la gasolina», mencionó Alejandro Vargas, titular de la Fiscalía de Distrito Zona Noroeste.
Un grupo de menonitas interceptó a José Alfredo y, para impedir que huyera, bloqueó los puntos de acceso y salida de El Capulín con maquinaria pesada. Las fuerzas de seguridad, incapaces de abandonar la comunidad, solicitaron el apoyo de la Fiscalía General del Estado, quien, en representación, envió a Vargas para mediar entre las partes.
Vargas detalla que la negociación concluyó al cabo de unas horas; el conductor de Pemex devolvió la pipa y las autoridades federales abandonaron el lugar.
En el transcurso del suceso, según advierte el activista Julián LeBarón, el comandante Cruz Pérez extorsionó al productor Johan Nikels Martens. Le solicitó una cantidad de entre $500 mil y $800 mil pesos a cambio de no esposarlo. Pero Nikels Martens se negó y fue detenido. Más aún, LeBarón exhibió que Cruz Pérez decomisó objetos que no guardan relación al conflicto, entre ellos un vehículo.
El LeBarón y una comitiva de menonitas se manifestaron al día siguiente afuera de las oficinas de la FGR en Nuevo Casas Grandes para exigir la liberación de Nikels Martens y la devolución de los bienes asegurados. Bajo presión durante horas, el personal devolvió durante el domingo 19 al productor y al automóvil.
Los manifestantes denunciaron a Cruz Pérez por los delitos de extorsión y abuso de autoridad. Porque, presuntamente, no sería la primera vez que el comandante obtiene a expensas de la población.
Por su parte, José Alfredo fue detenido la noche del sábado 18 por su presunta responsabilidad en el delito de daños.
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