Al exgobernador Miguel Alemán y a su esposa doña Cristian, nunca les gustó Xalapa, se dice incluso, que pasó por su mente cambiar los poderes al puerto de Veracruz, ni para culparlos, siendo honestos Xalapa es bastante feo, tiene un clima impredecible, jamás sabe uno como vestirse, en la mañana un frío que pela el hueso, a mediodía una sensación térmica de 30 grados con humedad, que provoca sentirse como tamal en vaporera y por la tarde, cae de sorpresa un diluvio que inunda la mitad del pueblo, los xalapeños están acostumbrados a salir vestidos como cebollas con capas de ropa, el paraguas, el chubasquero y las sandalias, pero para los que no somos de aquí, es horroroso.
El tráfico en toda la ciudad es una monserga, salir en auto un par de kilómetros, te toma por lo menos media hora; el centro de la ciudad y su extraño pavimento ¡Imposible salir entaconada! ya de la subida empedrada de la calle Revolución ¡Ni hablamos! Visualmente la ciudad es poco atractiva y para colmo, el centro de la ciudad es espeluznante, con esos locales comerciales cuya estrategia de marketing, consiste en colocar bocinas musicalizando la escena con ritmos populacheros, de duro contra el muro y macizo contra el piso, un horror visual y auditivo.
Por eso, es que no resultaría extraño, que a la gobernadora electa Rocío Nahle García, la capital del estado no le sea para nada grata, y prefiera permanecer en la vibrante zona conurbada Veracruz-Boca del Río, con un clima mucho más estable y tráfico más fluido, la realidad es que ni para culparla, despachar desde el World Trade Center de Boca del Río, resultaría mucho más conveniente, que venir a padecer humedades y olor a encierro, al antiguo Palacio de Gobierno, además la conectividad de la capital del estado, es bastante deficiente en avión es un logro salir del diminuto aeropuerto y las vías a Veracruz y a Ciudad de México, tampoco es que sean las mejores.
Sin embargo, sería un error grave por su parte, dejar la plaza principal vacía, ya que si bien, el corazón empresarial estatal se encuentra en la zona conurbada, es aquí en la capital del estado, donde se ubican los tres poderes, es aquí en Xalapa donde estará concentrado el gabinete y toda la maquinaria gubernamental y dejarlos solos, sería un riesgo que le podría salir carísimo, a la primera mujer que gobernará Veracruz.
Si no me creen, pregunten a don Patricio Chirinos Calero, como le fue con el vacío de poder que generó su ausencia y que fue hábilmente ocupado por ¿Quién creen? Si, por Miguel Ángel Yunes Linares y justo ese señor, es el que se acaba de meter como la humedad, en los cimientos del Movimiento de Regeneración Nacional.
Así que si doña Rocío se decanta por dejar vacía la plaza política principal del estado, esta sería llenada con la presencia de dos árabes lángaros y con muchísima labia, Miguel Ángel Yunes Linares, a quien no hace falta describir y Ricardo Ahued Bardahuil, este último como la tía Cata, con su carita de muy buena gente, pero con las uñitas bastante afiladas y en una de esas ¡Pum! Y da el sablazo.
Cosas de la vida y menudencias
Y en el Senado de la República, como nunca mis hermosos ¡Trabajando a marchas forzadas! Y es que ahora se alista un paquete de reformas, que permitan que los cambios en materia judicial, se concreten a través de una reestructura de las fiscalías estatales y de los ministerios públicos, con esto se pretende transparentar las funciones de las fiscalías estatales ¡Suerte con eso!
Finalmente, en el Senado de la República, se percataron que es en las fiscalías estatales y en los ministerios públicos, donde se genera mayor corrupción en la impartición de justicia ¡Al fin vieron más allá de lo evidente!
Ayer la gobernadora electa Rocío Nahle García y la senadora Claudia Tello, quien recibirá la Secretaría de Educación de Veracruz el próximo diciembre, se reunieron en un salón de Emiliano Zapata con la agrupación Maestros con Moisés y Maritza, ambos subsecretarios de educación de Veracruz, quienes intrépidos como son, llevaron a toda la gente de sus oficinas para mostrar músculo con la gobernadora electa.