CHIHUAHUA.- A más tardar finales de enero, las autoridades contemplan concretar el Fondo de Movilidad, con el cual le aplicarán un impuesto de 1.5% —todavía no se define si semanal o mensual— a los conductores de plataformas de transporte en el Estado —Uber, DiDi, InDriver, etcétera—. Con los recursos, se planea invertir en obras pequeñas de infraestructura.
Según diera a conocer el subsecretario de Transporte, Luis Manuel Aguirre Aguiera, el propósito del Fondo es que este tipo de servicios se encuentren regulados, para que no ocurra lo mismo que con DiDi Plus, cuyos trabajadores se protegieron con un amparo federal para continuar circulando, aunque fueron retiradas a mediados de diciembre por no contar con permisos en la legislación chihuahuense.
En tal sentido, busca una modificación a la Ley de Ingresos y a la Ley Estatal de Transporte para —en sus palabras— «llegar a una regulación plena de la plataforma y los choferes y, sobre todo, la aportación del 1.5%, Tienen que estar cubiertos este tipo de aspectos normativos porque, si no, estas plataformas y servicios […] recurren a instrumentos legales para frenarnos el actuar».
Desde este lunes 2 de enero —reveló— iniciaron las reuniones con la Secretaría de Hacienda para definir las reglas de operación. Y especuló que para este mes quedaría determinada la cuota, la cual se utilizaría para financiar obras menores, como las ciclovías, y para darle mantenimiento a las las unidades como los taxis, las rutas alimentadoras y las troncales. Además, plantea solicitar registros de los operadores y los vehículos en circulación, sin afán de intromisión, aseguró.
En cuanto a las negociaciones con Uber, refirió que, tiempo atrás, los empresarios se mostraron indispuestos. Fue hasta recién que se acercaron a dialogar y aceptaron entregar parte de la información de sus conductores y vehículos «sin ningún problema». No obstante, indicó que todavía han experimentado desacuerdos en cuanto a lo que la índole financiera respecta.