Ciudad de México.- El equipo detectó el estallido del agujero negro cuando se encontraba estudiando los eventos de interrupción mareal (TDE).
Los astrónomos están consternados por el reciente hallazgo del comportamiento de un agujero negro. Todo comenzó en 2018 cuando detectaron una estrella que se hizo trizas cuando se acercó a este agujero negro. Esto ocurrió en una galaxia a 665 millones de años luz de la Tierra.
Yvette Cendes investigadora asociada del Centro de Astrofísica | Harvard & Smithsonian (CfA) y autora principal de un nuevo estudio que analiza el fenómeno, afirma que ella y su equipo descubrieron, en 2021, algo inusual en ese mismo agujero negro: estaba expulsando todo lo que devoró en 2018. Lo extraño es por qué comenzó a sacar todo ese material tanto tiempo después.
En busca de respuestas
La investigación se publicó en el medio The Astrophysical Journal, y Cendes califica el comportamiento del agujero negro a algo similar a eructar la comida. Esto ayuda a los astrónomos a comprender un poco más los “hábitos de alimentación” de los agujeros negros, elementos misteriosos del universo.
El equipo detectó el estallido del agujero negro cuando se encontraba estudiando los eventos de interrupción mareal (TDE), fenómeno que se refiere a cuando las fuerzas de gravedad comienzan a alargar a una estrella cuando es devorada por un agujero negro.
Luego de ver cómo el agujero se reanimó en 2021, el equipo se puso manos a la obra para saber qué lo provocó. Para ello, recopiló observaciones del TDE, denominado AT2018hyz, en múltiples longitudes de onda de luz utilizando el VLA, el Observatorio ALMA en Chile, MeerKAT en Sudáfrica, el Australian Telescope Compact Array en Australia, el Observatorio de rayos X Chandra y el Observatorio Swift en el espacio. Las observaciones de radio del TDE resultaron ser las más llamativas.
Cuando ocurren, los TDE son bien conocidos por emitir luz. A medida que una estrella se acerca a un agujero negro, las fuerzas gravitatorias comienzan a estirarla. Después de ello, el material alargado gira en espiral alrededor del agujero negro y se calienta, lo que crea un destello que los astrónomos pueden detectar desde millones de años luz de distancia.
“Hemos estado estudiando los TDE con radiotelescopios durante más de una década y, a veces, descubrimos que brillan en las ondas de radio mientras arrojan material mientras el agujero negro consume la estrella por primera vez”, dice Edo Berger, profesor de astronomía en Harvard y CfA, y coautor del nuevo estudio.
Suele pasar que un material devorado es arrojado de regreso al espacio. Esto puede deberse a que hay agujeros negros que no alcanzan a digerir todo lo que se comen, como si hubiera un desorden en su accionar.
Este flujo de salida casi siempre ocurre de inmediato luego de que la estrella es devorada, pero no años después, lo cual es extraño.
“Esta es la primera vez que presenciamos un retraso tan largo entre la alimentación y la salida”, dice Berger. “El siguiente paso es explorar si esto realmente sucede con más frecuencia y simplemente no hemos estado observando los TDE lo suficientemente tarde en su evolución”.
Cuando ocurren estos eructos, suelen ser fuertes. A modo de comparación, la mayoría de los TDE tienen un flujo de salida que viaja al 10% de la velocidad de la luz; pero en este caso ocurre a una velocidad del 50% de la velocidad de la luz, dice Cendes.
Con Información de: Muy Interesante