Audio. Secretario General de Gobierno, César Jáuregui Moreno.
CHIHUAHUA.- Tras la captura de Julio César N, a quien se le responsabiliza de tirar en Pitorreal los cadáveres de los dos sacerdotes jesuitas y el guía de turistas, una vez que José Noriel Portillo Gil, alias El Chueco, los asesinara, el secretario General de Gobierno, César Jáuregui Moreno, aseguró que el caso va «en la dirección correcta».
El subsecretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Ricardo Mejía, anunció la detención de Julio César, presunto cómplice de El Chueco, capo de Gente Nueva, grupo del Cártel de Sinaloa, en el homicidio de Javier Campo Morales, Joaquín Mora Salazar y Pedro Heliodoro Palma Gutiérrez el pasado 20 de junio en Cerocahui, municipio de Urique.
Durante la conferencia de prensa matutina, Mejía presentó su informe de Cero Impunidad. Destacó en él que Julio César fue aprehendido en Mexicali, resultado de operativos del Ejército y la Guardia Nacional. Y se le decomisaron armas y carros. Con ello, ya suman 12 supuestos vinculados al grupo delictivo encabezado por El Chueco.
Jáuregui Moreno manifestó que todas estas acciones conducen poco a poco al esclarecimiento del caso del homicidio múltiple en Cerocahui. Con cada aseguramiento o detención —confirmó— se está más cerca de dar con el paradero de El Chueco.
Y dijo: «Se reafirma el comrpomiso que hicieron todas las autoridades de resolver este asunto. Porque resulta de primordial importancia que sujetos como este, que son generadores de violencia a ese nivel, no puedan estar en las calles imprudentemente».