Ciudad de México, 23 de noviembre de 2022.- Se antoja muy superficial considerar la organización de la presimarcha del próximo 27 como evento para alabar la personalidad del Ejecutivo, para llevarlo a sentirse de nuevo apapachado, querido, admirado por el pueblo bueno, por el grupo de ciudadanos felices, felices, felices por la transformación y agradecidos de tenerlo viviendo en Palacio Nacional. Es, la del próximo domingo, la exhibición más completa del miedo, muestra su significado porque ¿si el primer mandatario cuenta con el 70 por ciento de aprobación y respaldo, para qué le sirve la manifestación? No tiene ese porcentaje, no le queda ni en relación con los 30 millones de votos captados en el 2018 y de ahí surja la necesidad de mostrar músculo, de autoconvencerse ha sido la compra de voluntades su mejor estrategia.
Es real y está muy claro que en prácticamente todos los rubros, México se encuentra peor hoy que hace cuatro años. El régimen de la autodenominada Cuarta Transformación, encabezada por el presidente más mentiroso de la historia de México, registra saldos negativos en las principales áreas de gobierno. Nuestro país pierde presencia, día a día, como referente internacional y retrocede en las mediciones internacionales, en materia económica, de seguridad, de energía, de salud y de bienestar humano. El rechazo de la sociedad mexicana al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ya es patente y el mandatario pretende ocultarlo y seguir engañando con su presunta popularidad mayoritaria, en la marcha del próximo domingo, a la cual están convocados todos aquellos beneficiados con sus programas sociales de corte electorero y parte de su estructura política en todo el país. Todos los días, el tabasqueño hace uso de los recursos federales y de Palacio Nacional para decir mentiras, contabilizadas y alcanzando la cifra, al primero de septiembre de 61 mil.
Con falsedades se pretende ocultar el fracaso de su gestión en los rubros: crecimiento económico, seguridad pública, construcción de infraestructura, bienestar social, educación, salud y un largo etcétera.Pese a los errores en las planeaciones, en los cálculos de costos, en las posibilidades de recuperación de inversión, de viabilidad financiera, sigue presumiendo las mega obras aún y cuando se revelan como los más costosos fracasos, como barriles sin fondo a los cuales se les seguirá subsidiando para poder operar. El Felipe Ángeles ni siquiera se asoma a lo anunciado: un aeropuerto de calidad internacional; en Dos Bocas no se producen sino problemas y se dan muestras del significado del amor presidencial: Manuel Bartlett ha sido incapaz de dotar de una central eléctrica a la refinería ordenada por su jefe. El Tren Maya sigue considerado como ecocidio de proporciones gigantescas, aún cuando el de Macuspana ofreció no tirar ni un árbol en su construcción, y no se espera este listo este sexenio. En materia de energía, el presidente viola impunemente la Constitución y los acuerdos internacionales para privilegiar a las empresas energéticas estatales, en las cuales impera la ineptitud y la corrupción, como en la CFE, a cargo de Manuel Bartlett, cuya riqueza ha sido cuestionada en su origen y, la presencia de su primogénito obteniendo jugosos contratos como proveedor con muestrario para vender desde bolígrafos hasta sofisticados equipos de salud, petroleros o junto con la pareja tener el mejor cliente de su carbonería. Pemex, en manos de un agrónomo, es un barril sin fondo,sigue acumulando pérdidas y no encuentran la fórmula para detener la millonaria sangría de dólares. Por cierto, Romero no será el candidato al gobierno de Tabasco, el lugar ya se lo apartaron al de Fonatur a Javier May Rodríguez, quien si cumple con el perfil de máxima ignorancia.
Por lo anterior es evidente el desgaste del mandatario y lo cual le produce desesperación y no duda en poner en marcha acciones encolerizadas encaminadas en recuperar popularidad y defender sus proyectos, decisiones de gobierno y hasta su conducta personal. Es evidente que para hacer cumplir sus caprichos no duda en violar la Constitución si no puede modificarla para cuadrarla a sus deseos. No duda en desaparecer organismos que sirven de contrapeso a la administración federal y en correr de fea forma a sus colaboradores cuando están en desacuerdo con sus ordenamientos. Según comentan con gran mortificación algunos morenistas coautores del triunfo del 2018, el tabasqueño no dudará en dinamitar la estabilidad política de México si pierde las elecciones federales del 2024.
Vale la pena no olvidar que México era la economía 12 del mundo en la primera década de este siglo; hoy estamos en el lugar 16 de acuerdo con el ranking del Banco Mundial. En el Índice de Competitividad Mundial de este 2022, México está en el lugar 37 de 43 economías que mide el Instituto Mexicano para la Competitividad. En este sexenio de “Primero los Pobres”, México ha perdido posiciones en siete de los 12 componentes que miden el desarrollo de la sociedad y el país está en el lugar 66 de 169 países en el Índice de Progreso Social.
López Obrador, visto está, no gobierna, hace campaña, eso era lo único le salía bien porque era el crítico opositor. Hoy no recibe el mismo resultado porque no acepta la más mínima opinión en contra de su gobierno y su planteamiento va en sentido contrario: al no poder autocriticarse, ni prometer, recurre a la alabanza de resultados sólo vistos en la utilización de la pobreza para captar agradecidos, para sumar feligresía compuesta por quienes menos tienen y saben. Sigue siendo un líder opositor de una fracción de la población y no un estadista en el gobierno al servicio de todos los mexicanos.
Todas las baterías y recursos del gobierno de AMLO están enfocados en mostrar su músculo político en el desfile de gobierno del próximo domingo. Es lo único importante en estos momentos en Palacio Nacional, y toda la estructura del gobierno federal y de los gobiernos estatales y municipales morenistas está volcada a eso. Será movilizada la población pobre del país, pues la clase media ya la perdió López Obrador. Será una movilización clientelar, en la que habrán de participar todos aquellos sectores de la población sido beneficiados con los programas sociales, desde las pensiones para adultos mayores hasta los “ninis” receptores de dinero sin hacer prácticamente nada.
El secretario de Gobernación, Adán Augusto López, el fontanero de esta administración, está encargado de coordinar las movilizaciones desde los estados, las cuotas de participación para la marcha del próximo domingo, a fin de poder adorar al macuspano como él pretende se merece. El dinero de las arcas federales y estatales será usado a raudales.
DE LOS PASILLOS
En política exterior, el presidente López Obrador es un neófito. No entiende y no se esfuerza por aprender. Tiene hasta miedo de participar en los foros internacionales y manda a su subordinado, el canciller Marcelo Ebrard, quien ingenuamente sigue creyendo que tiene posibilidades de ser candidato presidencial de Morena. Apenas la semana pasada hubo tres cumbres (COP, G20, APEC), a las que no asistió el tabasqueño mandatario de México, ausencia que se sumó al desaire al presidente Joe Biden en la Cumbre de las Américas, celebrada en Los Ángeles. Sus fracasos se acumulan, el último: su propuesta para presidir el BID, Banco Interamericano de Desarrollo. Su primera opción fue Alicia Bárcena, pero sin el apoyo real de su país declinó la candidatura. El mandatario propuso de última hora a Gerardo Esquivel, para quitárselo de encima del Banco de México, donde demostró tener independencia de criterio, pero tampoco fue apoyado por su país, por lo que el aspirante brasileño se impuso fácilmente. Esta derrota se suma a la que tuvieron las candidaturas de Jesús Seade a la OMC, y la de Nadine Flora Gasman en la OPS.También hay que señalar los fracasos de México en la diplomacia continental. El último es la cancelación de la Cumbre del Pacífico en la Ciudad de México. Además, sigue pendiente el inicio del panel arbitral en respuesta a la demanda de Estados Unidos y Canadá por el trato preferencial a CFE y PEMEX, y hay una creciente probabilidad de algo similar en el caso del maíz amarillo…
Durante la sesión de Comisiones Unidas de Reforma Política-Electoral, la circulación del dictamen, el cual prácticamente replica la iniciativa del presidente López Obrador, acentuó la disputa entre las y los diputados de Morena y los de oposición, quienes adelantaron votarán en contra del proyecto. Los integrantes de las bancadas del PRI, PAN, PRD y MC denunciaron no se tomaron en cuenta sus propuestas. Salvador Caro, de MC, reclamó: “Este proyecto desaparece el INE, este proyecto desvirtúa nuestro sistema democrático, va dirigido a limitar la representación popular, centralizar los procesos electorales y crea un sistema para que se elijan puros plurinominales”. La perredista Elizabeth Pérez, calificó como “una burla” la integración de las comisiones para dictaminar una reforma electoral, porque “hicieron lo que quisieron. Esta es una reforma retrógrada que nos llevará al pasado autoritario donde el gobierno organizaba y calificaba elecciones, por eso adelantamos que no pasará”….Y, el PRI… en veremos.