Ante la indiferencia del gobierno federal, en torno a las casi 112 mil personas desaparecidas en los últimos sexenios, que se incrementó considerablemente en la presente administración que, por cierto, presentó un censo “rasurado”, hay un grupo de Madres Buscadoras que no cesan en su esfuerzo y esperanza por encontrar a sus familiares. Este fin de semana, en su estoica labor, la dirigente de las Madres Buscadoras de Sonora, Cecilia Flores, reveló que, en la playa del Choyudo, en el Mar de Cortés, gracias a una llamada anónima ubicaron 29 fosas, en las que hallaron 14 cuerpos en tan sólo 4 de ellas.
Esta semana seguirán su búsqueda. Tras el hallazgo de las primeras fosas clandestinas, posteó: “imaginen cuanto dolor hay escondido en esta tierra. Con dos palas y nuestros corazones vamos a remover cada centímetro de tierra para que no se quede nadie”. En un mensaje en sus redes sociales Cecilia Flores, da su visión del México actual, de la violencia, de la desesperanza, del México dolido y golpeado por la inseguridad.
Sus reflexiones llegan a lo más profundo y mueve cualquier fibra por dura que está sea, al señalar “estamos caminando sobre un cementerio clandestino. Podríamos estar pisando a nuestros hijos sin saberlo.
Aquí está enterrada la esperanza de un país que agoniza. Y fue más allá, al suplicar a los “grupos criminales que pacten la paz, (que) no sigan con esta guerra donde gana el que más lastima”, y sus reflexiones son una dramática realidad, al señalar que “no sé cuántas generaciones falten para sanar tanto dolor; la herencia de nuestros niños, es la tragedia de crecer sin padres”.
PILAS
Y dónde se han puesto las pilas es en Chimalhuacán. A través de un trabajo coordinado de los gobiernos federal, estatal y municipal, se busca erradicar la violencia y la doble alerta de género en el municipio que encabeza la alcaldesa Xóchitl Flores Jiménez. En los trabajos para alcanzar esa meta, trabajan la Dirección de la Mujer, la Unidad Especializada Para la Atención a Víctimas de Violencia Intrafamiliar y de Género, la Célula de Búsqueda de Reacción Inmediata y la División Municipal de Análisis y Contexto. Con la estrategia que opera actualmente, Chimalhuacán se divide en 80 cuadrantes de seguridad con línea telefónica directa cada uno.
MUY OJÓN
El que salió “muy ojón para pichón”, además de arrogante, prepotente y tranza, fue el líder nacional del Sindicato Mexicano de Salud (SIMESA), Jesús Ricardo Cruz Cotero, a quien vendieron como el salvador y justiciero de los trabajadores del sector, y resultó ser una llamarada de petate dirían en mi barrio. Se escucha en los pasillos del SIMESA, que Cruz Cotero, gusta de comprar perros de raza y automóviles de alta gama, y que le molesta la rendición de cuentas.
Dicen que cuando el río suena, agua lleva, y sus excesivos gastos provocaron que más de un dirigente estatal levantará la ceja, y la respuesta inmediata de Cruz Cotero, fue fabricar pruebas en contra de los inconformes que le pidieron cuentas claras y transparencia de las cuotas sindicales.
Y fue el dirigente del SIMESA en Michoacán, José Edgar Vidales Becerril, el que sufrió los embates de Cruz Cotero, a través de una guerra sucia en redes sociales. En respuesta a esa acusación, el químico Vidales Becerril, dio a conocer que presentó una denuncia ante la Fiscalía de Justicia de Michoacán, en contra de Carlos Amador Ramírez, encargado de difundir la información generada en el gremio.
De acuerdo con el líder del SIMESA en Michoacán, se difundió una información errónea y sesgada que lo involucraba en un supuesto contrato para servicios subrogados. Vidales Becerril, rechazó esa acusación, al precisar que no está facultado para firmar contratos y que la firma que aparece en el documento apócrifo, no es suya.
Ya entrados en calor, José Edgar Vidales Becerril, denunció que Cotero les pidió firmar una carta de absoluta lealtad. Ah chinga, dónde he escuchado eso, será que Cruz Cotero ya se lanzó a los brazos de Morena, seguro que sí. Y no sólo eso, el dirigente michoacano lamentó que Cotero no quiera rendir cuentas claras y que pretenda eternizarse al frente del SIMESA. Vaya decepción entre sus agremiados.