El cierre repentino de la Carretera Juárez por parte de transportistas en protesta por el reciente homicidio de uno de los conductores de camiones de carga ha sumido la vía en el caos. El tráfico se ha paralizado debido al acumulamiento masivo de cientos de vehículos, generando una situación de congestión vehicular sin precedentes.
La protesta, liderada por el activista Julián LeBarón, ha anunciado su intención de mantener bloqueada la carretera hasta que se detenga a los responsables del asesinato. Esta acción ha generado un enfrentamiento directo con las autoridades policiales estatales, quienes se acercaron al lugar del bloqueo en un intento por restablecer el orden. Sin embargo, LeBarón, quien también es transportista, rechazó su presencia y les instó a enfocarse en la búsqueda de los culpables del crimen.
El caos resultante ha causado desconcierto y molestia entre los viajeros que circulan por la vía, quienes se ven completamente detenidos en sus desplazamientos. Hasta el momento, no se ha reportado la intervención de autoridades federales para mediar en la situación, dejando a los conductores varados sin una solución inmediata a la vista.
Esta situación evidencia la creciente frustración y descontento dentro de la comunidad de transportistas, así como la necesidad urgente de abordar la seguridad en las carreteras para prevenir futuros incidentes violentos que afecten la vida y la tranquilidad de quienes dependen de estas vías para su sustento y movilidad.