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El secretario del Ayuntamiento, Roberto Fuentes, informó que debido a las restricciones que hay en la ley y en materia de Derechos humanos, el Municipio no puede hacer mucho con relación al tema de los campamentos migrantes que se han puesto en diferentes zonas de la ciudad.
Dijo que lamentablemente, no ha habido alguna respuesta por parte del Instituto Nacional de Migración (INM) para atender esta situación en la que cientos de personas oriundas de países de Sudamérica, están en condiciones casi insalubres en estos asentamientos improvisados, pero la autoridad municipal no puede actuar, más que estar atentos a alguna necesidad o eventualidad.
Comentó que lo único que se ha podido hacer, es apoyar con insumos y otras ayudas a las asociaciones civiles que se encargan de apoyar a los migrantes, así como estar al pendiente si es requerido algún traslado de urgencia.
La permisión de estar en estas zonas como en la Avenida Juan Pablo II, antes de llegar al paso superior es facultad del INM, que no se ha acercado para intervenir y mientras tanto, las personas originarias de países como Venezuela, Honduras y Guatemala principalmente, se mantienen en esas condiciones, a la intemperie, sin algún tipo de seguridad o bienestar.